Tener una tarjeta de crédito aporta muchas ventajas, especialmente en épocas de inflación, ya que podés financiar tus compras en varias cuotas, hacer compras «al contado», pero abonando al mes siguiente, entre otras posibilidades.
Sin embargo, como cualquier instrumento de deuda, es de suma importancia tener las cuentas al día, evitando únicamente pagar el mínimo, ya que los intereses se acumulan, y mucho menos no pagar el resumen, ya que las consecuencias son graves.
¿Qué pasa si nunca pago una deuda de tarjeta de crédito?
En el caso de que no pagues el resumen de tu tarjeta de crédito, en primer lugar incurrirás en una importante deuda con la entidad financiera. Además, el banco no solo dejará de prestarte los servicios que te brinda actualmente, entre ellos el acceso a la tarjeta de crédito, sino que podrá intimarte legalmente para que pagues.
En caso contrario, los intereses seguirán subiendo y podrían incluirte en el Registro de Deudores del BCRA, como también en el Veraz, dañando seriamente tu perfil crediticio y perdiendo la posibilidad de acceder a ciertas prestaciones como préstamos inmediatos.
Además, si la entidad financiera decide hacerte juicio, los intereses que te cobrarán serán más altos que los incurridos por la simple mora, por lo que siempre es aconsejable contactarse con el banco y ver la posibilidad de un refinanciamiento.
Si la entidad financiera te hace jucio, los intereses serán más altos que la simple mora
En el hipotético caso que decidas no pagar nunca más esa deuda, la misma tendrá vigencia durante 3 años y se informará como máximo durante 5 años en instituciones como el Veraz. En el caso de que pagues, la información del Veraz se extiende dos años más.
Luego de ese lapso, la deuda quedará prescripta y no podrá ser informada. Sin embargo, durante esos 5 años, el banco podría llegar a iniciarte un juicio y, por ejemplo, embargar parte de tu salario, por lo que siempre es recomendable pagar en tiempo y forma.
¿Qué pasa si pago el mínimo de una tarjeta de crédito?
El pago mínimo de las tarjetas de crédito es la fracción de tu resumen más pequeña que el banco acepta para mantener tu crédito y productos activos, evitando que te conviertas en «moroso», es decir, podrás seguir utilizando la tarjeta de crédito sin que tu historial crediticio se vea afectado.
Sin embargo, hacer únicamente el pago mínimo no es aconsejable, ya que los intereses comenzarán a acumularse, lo que puede dificultar enormemente el próximo pago, excepto que reduzcas gastos, incrementes tus ingresos, entre otras alternativas.
Es decir, que si no tenés cuidado, podrías incurrir en un «círculo vicioso» en el que mes a mes solo abonarías el mínimo, pero, debido a los altos intereses, seguirías adeudando el capital original e incluso más.
Si no realizás una correcta gestión financiera de tus ingresos, podrías incurrir en un efecto «bola de nieve»
En otras palabras, se genera un efecto de «bola de nieve», en el que los intereses aumentan cada vez más, superando ampliamente la deuda original. Por este motivo es importante evitar caer en esta situación, ya que puede llevarte a una deuda descontrolada y dificultades financieras a largo plazo, por lo que en lugar de depender únicamente del pago mínimo, es aconsejable que pagues más cuando sea posible y reduzcas la deuda total. De esta forma estarás evitando problemas financieros a futuro como perjudicar tu historial crediticio.
¿Cuántas veces se puede hacer el pago mínimo de la tarjeta?
El sistema de pagos mínimos con tarjeta no tiene un límite fijo establecido. Sin embargo, es fundamental tener en cuenta que el pago mínimo generalmente se calcula como un porcentaje reducido, siendo por lo general un 10% del saldo pendiente.
En muchas ocasiones, este monto mínimo es insuficiente para cubrir el total de los intereses que se generan y una parte del capital adeudado, lo que resulta en un aumento constante de la deuda.
Este fenómeno se debe al temido efecto del interés compuesto, que, en pocas palabras, implica que el cálculo no solo se hace sobre el capital inicial, sino también sobre los intereses acumulados previamente. Por este motivo, la deuda tiende a crecer progresivamente y puede volverse abrumadora.
Es de suma importancia que estés alerta si la deuda alcanza o supera el límite de financiamiento concedido por el banco. En tal caso, perderás la opción de realizar pagos mínimos, y el banco te exigirá que abones la deuda total de forma inmediata.
Esto conlleva consecuencias graves, como altos intereses y posibles cargos adicionales, además de tener el mencionado impacto negativo en tu historial crediticio. Es importante que recuerdes que incluso cuando el banco ya no te ofrezca más financiamiento, los intereses seguirán acumulándose.
Por todas estas razones, los expertos financieros siempre aconsejan que, si no podés pagar la totalidad de la deuda, optes por realizar pagos que excedan el monto mínimo requerido. Al hacerlo, lograrás reducir significativamente la carga de intereses y, de manera gradual, disminuirás el capital adeudado.
Esta estrategia te ayudará a evitar caer en un ciclo interminable de deuda y a tomar el control de tus finanzas de forma más efectiva. A su vez, es fundamental que mantengas una gestión responsable de tus tarjetas de crédito y evites acumular deudas innecesarias, permitiéndote mantener una buena salud financiera.