El DÓLAR BLUE noquea al PLAZO FIJO: esto alertan expertos
El ahorrista está desorientado, y a la elevada inercia inflacionaria de los últimos meses se le suma otro «enemigo» al plazo fijo tradicional: la escalada del dólar libre de los últimos días, que acumula en las dos jornadas de esta semana un 12%. Por lo tanto, este contexto está desalentando las colocaciones en pesos.
Como dato a tener en cuenta, el plazo fijo tradicional está ofreciendo desde hace unos días una tasa nominal anual (TNA) de 81%, porcentaje que representa un interés de 6,66% mensual.
Una cifra que en abril queda severamente afectada por el incremento de los precios de la economía y por la trepada del dólar libre.
El billete blue avanza sólo en abril alrededor de 26%, un nivel que supera tres veces a lo que ofrece este mes un depósito en pesos a 30 días. Y que lo deja fuera de competencia.
Incluso, sólo en la jornada del martes el dólar aumentó alrededor del 7,14%, más de lo que paga en todo el mes un plazo fijo tradicional. Incluso, en los primeros dos días de la semana avanzó 12%.
En definitiva, el que apostó al dólar en abril le gana por «lejos» a las colocaciones en pesos.
La suba de la tasa de interés del plazo fijo hasta el 81% anual no alcanza para seducir al ahorrista frente a la escalada del precio del dólar en abril.
Plazo fijo, inflación y tasa de interés para seducir ahorristas
Por otro lado, el plazo fijo tradicional también está quedando por debajo respecto a la inflación desde hace dos meses, debido a que en marzo el índice de precios al consumidor (IPC) fue de 7,7% y en abril se estima que rondará el 7%. Es decir, en ambos casos, la tasa real que ofrece un depósito bancario es negativa ya que es inferior a dichas cifras.
En resumidas cuentas, si se analiza el comportamiento en todo el año, un plazo fijo tradicional ofrece una renta en torno al 30% en los 4 meses que ya están pasando del 2023. En tanto, la inflación avanza en un nivel similar en el mismo período y el blue trepa 43%.
En definitiva, en el balance de los últimos meses el dólar se transforma en el gran ganador. Un atractivo que aparenta acrecentarse en el marco de un escenario donde en la economía faltan dólares por los diferentes desfasajes y la extrema sequía que afectó al campo. A lo que se suma la incertidumbre política en pleno año electoral.
«Con la disparada de los últimos días del dólar, quién hizo un plazo fijo a principios de año tuvo una renta acumulada en pesos de aproximadamente 32%, mientras que el billete blue se movió más de 40%. Con ese resultado, y sobre todo la aceleración de estas semanas del billete libre, como señal de elevada turbulencia, no hay mucho atractivo para seguir manteniendo posiciones en pesos«, resume a iProfesional Fernando Baer, economista de Quantum.
En consecuencia, afirma que el Banco Central debería «subir más» la tasa de interés para intentar revertir las expectativas de situación «descontrolada»
Por eso, considera que, como mínimo, la renta que paga un plazo fijo tradicional tendría que subir 9 puntos porcentuales para atraer a los ahorristas, pero «el proceso en esta etapa no se resuelve sólo con suba de los rendimientos. Generar un cambio en expectativas es necesario, además de subir la tasa», concluye Baer a iProfesional.
La escalada del dólar informal y la falta de atractivo por las inversiones en pesos se sustentan en una situación económica y política incierta.
Dólar o plazo fijo, qué sucederá hacia adelante
Mientras tanto, el ahorrista está observando hasta dónde puede llegar el precio del dólar para decidir también cómo se posiciona frente al plazo fijo tradicional en pesos.
«No se pueden descartar nuevos desafíos y nuevos saltos en la brecha hacia adelante, por lo que los ahorristas van a mirar el plazo fijo con más desconfianza. El salto en el precio del dólar estaba dentro de lo previsible», dice a iProfesional Sebastián Menescaldi, economista y director asociado de Eco Go.
En el caso que el ahorrista tenga como única alternativa legal acudir a un plazo fijo tradicional para resguardar sus pesos, este economista recomienda: «Le diría que espere porque, probablemente, si sigue así esta situación de alta inflación y ascenso del precio del dólar, como mínimo va a generar una suba de la tasa de interés».
Para Salvador Vitelli, economista de Romano Group, con el dólar «tan desbocado, pierde completo sentido haber subido la tasa efectiva anual (TEA) del plazo fijo de 113% a 119%. Esto, claramente, atenta contra la demanda de instrumentos en pesos y genera que todo el público inversor mire al dólar».Incluso, sostiene que se debe ver la tasa de licitaciones de deuda en pesos, donde se ha convalidado hasta 132,6% de TEA. Incluso, en el mercado de Ledes «hay tasas de 157,8%».
Más allá de la tasa de interés que se fije para intentar seducir a los ahorristas a que se queden en pesos e inviertan en el plazo fijo tradicional, existen otras cuestiones que generan desconfianza.
«Hoy en día es difícil pensar en una tasa que vaya a calmar esta corrida que se está dando, debido a que se depende de las decisiones económicas. No va a haber tasa que alcance. Sí, lógicamente, si se va al extremo y se pone la tasa del 1.000% de tasa efectiva, va a tener efecto, pero estamos hablando dentro de lo posible y de lo que se puede esperar que suceda», sostiene Vitelli.
Y finaliza: «A medida que no muestren cierta autoridad, criterio, estructura para la toma de decisiones económicas y algún sendero, hablar en términos de tasa no va a dar demasiado resultado en estos momentos».-