Cómo es la dieta paleolítica y qué beneficios se le atribuyen
El mundo de las dietas ha tenido una gran evolución en los últimos años. Han aparecido una gran cantidad de planes de alimentación diferenciados, que incluyen o carecen de algunos alimentos, y no necesariamente apuntan a impactar en el peso de la persona.
Dentro de las más populares se encuentra la dieta paleolítica, más conocida como dieta paleo. ¿De qué se trata? «Es un plan de alimentación basado en alimentos que están disponibles en la naturaleza, que el hombre se encargaba de recolectar y cazar para su consumo», explica la especialista en nutrición, Mariela Cardozo.
También conocida como dieta del hombre de las cavernas, tiene como principal objetivo alimentarse solamente de productos que se puedan extraer de la naturaleza. Esto implica que cualquier artículo que no pueda adquirirse de esa forma queda completamente fuera del plan.
Cuáles son los alimentos centrales en la dieta paleo
Los artículos que componen el centro de la dieta paleo son las carnes rojas, el pollo, todas las variedades de pescado y los mariscos. Además, «quienes siguen este plan alimenticio consumen todo tipo de frutas y vegetales, así como tubérculos, raíces, frutas secas y semillas», menciona la experta en Nutrición. Es importante tener en cuenta que todos los alimentos mencionados tienen que estar en su estado natural, es decir, no pueden haber sido procesados de ninguna forma, ya que perderían la esencia.
Cuando se piensa en este último punto, surge la pregunta de por qué se ha popularizado tanto a pesar de las restricciones que conlleva.
«Al no incluir cereales ni sus subproductos de molienda (pan, galletitas, amasados, facturas, medialunas, scones, galletitas dulces, muffins, entre otros), que generalmente están ligados a mantecas, grasas, margarinas, azúcares refinados con alto contenido energético, se reduce notablemente el valor calórico total de la ingesta que la persona hace», señala la especialista.
La dieta paleolítica implica consumir solo alimentos que puedan ser encontrados en la naturaleza.
De esta forma, quienes ponen en práctica este tipo de plan «suelen bajar de peso, notar mejoras en el estado metabólico -como reducción de los valores de azúcar en sangre, reducción de la presión arterial y también reducción de colesterol y triglicéridos-«, agrega la Lic. Cardozo.
Esto sucede porque los alimentos industrializados contienen en su composición altos niveles de sodio que se utilizan como conservantes, lo cual contribuye al aumento de la presión arterial y de otros valores. En este sentido, cabe aclarar que tampoco se incluye ningún alimento ultraprocesado como hamburguesas, salchichas, embutidos, snacks, congelados, envasados, entre otros; todos ellos portadores de altos niveles de sodio.
La dieta paleolítica se ha popularizado entre muchas personas, aunque es más conocida en los ambientes de gimnasio, donde suelen predominar las dietas altas en proteínas porque contribuyen a la formación de masa muscular.
Dado que este nutriente se encuentra en carnes de todo tipo, en huevos, frutos secos y semillas, se trata de uno de los que más ingieren quienes llevan este plan alimenticio. Cabe aclarar, además, que los lácteos también son fuente de proteínas, pero quienes llevan una dieta paleolítica no consumen este grupo de alimentos.
Qué productos no se incluyen en las dietas paleolíticas
Así como se han mencionado los productos que se consumen, también es importante considerar cuáles son los prohibidos. Los cereales, las legumbres, los panificados, todos los lácteos, cualquier tipo de azúcar, todos los industrializados y ultraprocesados están dentro de la lista negra de esta dieta, precisamente porque no se pueden encontrar en la naturaleza.
Si bien se han especificado todas las características del plan, la expera destaca la importancia de consultar con un especialista antes de comenzar a ponerlo en práctica, al igual que sucede con cualquier otra dieta.
La dieta «paleo» incluye variedad de verduras, pero también carnes que no estén procesadas o industrializadas.
Además de un experto en nutrición, también es recomendable hacer una visita a un médico que pueda evaluar las características particulares de la persona y pueda determinar si le conviene o no este tipo de dieta.