multiplicate por siete y trascendé
Eran los primeros días de agosto del 2017, Justina de 12 años. comenzaba su proceso de espera de un trasplante de corazón. Después de 10 años. y medio de tratamiento y de ser una de las 200.000 personas en Argentina que sabíamos que en algún momento necesitaría un trasplante, de un día para el otro, ese día había llegado. Necesitaba comprender el por qué y el para qué del proceso.
¿Por qué podría aparecer un corazón en tres o cuatro meses y no antes? ¿Qué derechos tienen los que esperan un trasplante y los trasplantados? ¿Por qué de las 200.000 personas que saben que van a necesitar un trasplante, solo hay 7.000 en lista de espera? ¿Por qué las terapias intensivas no informan del Glasgow 7 al INCUCAI? ¿Cuántos órganos se pueden trasplantar? ¿Cuáles se pueden trasplantar entre personas vivas?
Recurrí a mi equipo de comunicación e innovación. Con ellos exploramos qué podríamos hacer. Esa misma primer semana de Agosto le contaba a Justina lo que se nos había ocurrido y ella con simpleza y empatía – sabia que si su corazón no llegaba se moría – me dice «Papi, ayudemos a todos los que podamos». Nacía MultiplciateX7.
Justina quería ser veterinaria, aunque desde ese agosto del 2017 se convirtió en arquitecta de inspiración y esperanzas. Fue abogada de vida haciendo impulsar la Ley nacional Justina (27.447) y es cocinera, enfermera, doctora de las Casa Justina de todo el país.
Ayudemos a todos los que podamos, comunicando
Son 7 los órganos principales que se pueden donar: corazón, pulmones, riñones, hígado, páncreas, intestinos y médula ósea. Luego están los tejidos, córneas y otros. Son 3 los órganos que se pueden donar en vida: hígado, riñón y médula ósea. Aunque dones en vida o cuando terminen tus días en este mundo, trascendés! Y podría suceder, que te multipliques por siete, en siete personas viviendo; porque donaste tus órganos.
El promedio de trasplantes que se dan ante una persona que fallece, son 3,5 trasplantes. Depende del estado de salud de la persona fallecida que donará. De la compatibilidad de sus órganos con las personas que hay en lista de espera. Y otros factores médicos, logísticos y de los equipos que intervienen: cuatro en total!
Un equipo que cuida a la persona que espera el trasplante. Otro equipo que se dedica a mantener vivo a la persona que quizás lamentablemente fallece y se convierte en donante. Está el equipo que iniciado el proceso de donación, llega hasta el lugar donde está el fallecido y extrae los órganos. Y el equipo que, una vez recibidos los órganos, hará el trasplante. Equipos de profesionales de la salud, personas que hay que cuidar, formar, valorar y comprender para mejorar y contener, para eso las Casa Justina.
A través de la Red Ayudadores Del Trasplante, con más de 30 ONGs de todo el país, pudimos comprender los desafíos en cada rincón del país. Y junto con los equipos de Profesionales de la Salud identificamos junto a médicos del trasplante el desafío que tienen al ser la variable de ajuste. Además con procuradores y ablacionistas entendimos que comparten el desafío de la falta de valorización de su labor. Entre los diferentes actores del ecosistema, con vínculos y flujos de información, analizamos soluciones.
Desde 2017, la Ley Justina cambió el panorama para quienes esperan un trasplante de órganos
El paciente y su entorno
Vivimos la desesperación de la gente: La medicación no llega». «No puedo ver al médico». «Se interrumpe el tratamiento». «No me aprueban los estudios». «Mi hija se me está apagando».
Entre los 45.000 trasplantados vivos que hay en Argentina, uno de los desafíos que tienen es reinsertarse laboralmente. De ninguna manera el obstáculo es por su estado de salud, que ha mejorado por el trasplante. ¿Sabías que como empleador de un trasplantado gozás del setenta por ciento (70%) de las retribuciones que les abones?
Donación pediátrica y trasplante cruzado entre personas vivas
Todos los mayores de 18 años. somos donantes de órganos, salvo que digamos lo contrario. ¿Y los menores de 18 años.? Ante una situación de pérdida de la vida de un menor, los padres o responsables son los que dan el OK para la donación de sus órganos. Por eso nos acercamos a colegios y clubes, porque los niños inspiran a sus padres a considerar la donación de órganos.
Si Federico espera un trasplante de riñón y su pareja, Mariana, no es compatible; ellos pueden esperar por un Trasplante cruzado. Se busca una pareja espejo. Tomás, hermano de Juan, no puede donarle su riñón por ser incompatibles. Si los equipos médicos validan que Mariana es compatible con Juan y Tomás con Federico; entonces se puede realizar dicho trasplante.
Validamos servicios digitalizados de atención, inspiramos a que drones puedan trasladar muestras para laboratorio y aceleramos la llegada del traslado de órganos. Aprovechamos la inteligencia artificial para agilizar la comprensión de las necesidades y conocer mejor a los pacientes, eficientizar procesos e identificar áreas de mejora del trasplante.
Tenemos foco en el paciente, y comprendiendo su entorno, lo acompañamos para contener, cuidar y ayudar en todo tipo de complicaciones, incluido a las legales. Porque hay que facilitar el tratamiento, la disponibilidad y el acceso a la medicación, con la adecuada distribución con cobertura geográfica. Porque es fundamental valorizar y facilitar la actividad del Procurador, del Ablacionista y del equipo de trasplante.
Ayudemos a todos los que podamos para seguir contribuyendo a una salud integral.
Ezequiel Lo Cane, Papá de Justina, inspiradora con su «Ayudemos a Todos los que Podamos» del Multiplicatex7, de la Ley nacional Justina (27.447) de Donación y Trasplante de Órganos y del proyecto nacional Casa Justina. +54 9 11 6273-5515.