Giovanna Battaglia, de la pasarela al diseño de joyas
Giovanna Battaglia, de la pasarela al diseño de joyas
Su estilo inconfundible delata su pasado en las pasarelas del mundo y la lleva a ocupar un lugar preferencial en medios internacionales que dan cuenta de sus outfits y de su vida privada. Giovanna Battaglia Engelbert fue musa de Dolce & Gabbana en sus días de modelo, que arrancaron temprano, a sus 16 años. Esta italiana glamorosa nació hace 41 años en Milán, a los 28 se retiró del modelaje y se volcó al mundo editorial. Desde las páginas de revistas como Vogue y Vanity Fair se dedicó al estilismo y, más tarde, fue editora y consultora. Su sello personal son sus ojos y pelo negros y un estilo que no pasa desapercibido. Su guardarropa que va del total black a la paleta de colores más variada, incluye importantes accesorios que se asocian en la dosis justa de elegancia. Los tacos bajos son su fetiche. Su presencia se impone y su expertise le permite brillar, con elecciones que nunca necesitan más ni menos. Ella puede mixear con éxito prendas básicas con otras de lujo, ponerse un vestido de noche con botas bajas de día o con zapatos de taco mediano. Giovanna Battaglia es un referente tanto del street style como de las principales semanas de la moda. Casada con el millonario sueco Oscar Engelbert, su boda en Capri, con cuatro cambios de vestidos, y su despedida de soltera en Las Vegas fueron noticia. Desde 2016 trabaja para Swarovski, marca de la que hoy es directora creativa. Además, tiene una hija de dos años, Talitha Italia Engelbert, que hoy es el centro de su universo. En exclusiva con LA NACION Revista, cuenta algo más de su universo.
¿Cuánto hay hoy de tu pasado de modelo y editora?
Mirando hacia atrás, toda mi experiencia está basada en la creatividad, expresada en diferentes facetas. Aunque mi trabajo como consultora me dio, especialmente, la oportunidad de estar al día con lo relacionado al mundo del espectáculo, a actores y cantantes y a la industria de la moda. Mis conocimientos de los últimos veinte años hoy forman parte del alma que aporto en Swarovski.
¿Cómo es un día en tu vida?
Los días son una locura. Vivo y trabajo en Estocolmo, el estudio de diseño está ubicado en París, los cristales se fabrican en Wattens y el equipo está ubicado en todo el mundo. Todavía no he conocido personalmente a muchas de las personas con las que trabajo constantemente. Y tengo otra tarea que es nueva para mí: ser madre de una niña de dos años. Éste es, sin duda, mi trabajo más grande e importante. Sin embargo, tengo la suerte de contar con mucho apoyo y eso ayuda a sobrevivir.
¿Cuál es tu look personal? ¿Cambió con el tiempo?
Me gusta trabajar duro, jugar duro y vestirme duro. Mi apariencia evoluciona con la edad y la vida, y ésa es la parte divertida. También evoluciona cada temporada dando algo de nueva energía. Justamente la energía es la esencia de la moda.
¿Hay límites en la combinación de colores y patrones?
No, solo se trata de la actitud de cómo lo llevas.
¿Hay diferencias entre joyas para el día o para la noche?
Soy una amante de las joyas, las adoro sin importar el material. He coleccionado piezas especiales durante años y admiro a esas mujeres de Nueva York en los años 50, 60 y 70 que solían jugar con los diferentes tipos de joyas solo para divertirse. No importa si se trataba de una pulsera de plástico o de un rubí. En todos los casos eran fuente de autoexpresión y alegría. Creo que las joyas grandiosas se pueden usar de día o de noche, de manera informal o glamorosa, pero siempre con un guiño. Mi intención es crear piezas para las partes más extravagantes de nosotros, esperando ser expresadas.
¿Es posible expresarse a través de la joyería?
¡Sí! Las piezas ofrecen un adorno para la vida y el estilo de vida, y estamos entrando en una era en la que hay fluidez en la expresión: cada mañana, puedes cambiar tu estilo y lo que quieras decir con él.
¿Qué importancia tienen los accesorios a la hora de elegir un outfit?
Hay una cita que me encanta de Monsieur Yves Saint Laurent que dice que los accesorios son el mejor amigo de la ropa y que una pieza de joyería podría cambiar todo un look. Cuando te pones un collar de cristal puro, puedes convertir el atuendo más simple en algo fabuloso. En un momento en que nuestros conjuntos se vuelven cada vez más casuales, las joyas son más relevantes que nunca por su poder transformador. Son ese toque de luz, maravilla y positividad que todos estamos buscando.
La moda tiende al genderless, ¿qué pasa con la edad? ¿Las marcas seguirán acercándose a diferentes grupos en función de su edad?
Al menos Swarovski no lo hace. En lugar de hacer distinciones entre grupos de edad o entre géneros, tratamos de trabajar en un continuo, por lo que no importa qué tan viejo o joven se sienta uno, encontrará un lugar en ese continuo. Te damos la opción de encontrar tu lugar en forma de producto, diseño, pieza. Y lo mismo ocurre con el género, tienes todo un espectro para jugar y encontrarás un lugar en el que te sientas más cómodo. Esto está muy en línea con el desarrollo general de hacia dónde se dirige nuestra sociedad, y podemos hacer nuestra pequeña contribución.
¿Cuál es tu inspiración mientras creas?
Para la Colección I, quería explorar la belleza pura del cristal y cómo su magnificencia tiene sus raíces en estructuras geométricas y lógicas fundamentales. Mirar los primeros dibujos de Daniel Swarovski fue una inspiración absoluta. Descubrir la magia de sus primeros inventos y comprender el poder de su sueño me impulsa y es el camino que seguiremos.
¿Cuál es tu función como directora creativa?
Trabajo para la empresa desde 2016 y fue un gran honor ser nombrada directora creativa; mi nuevo cargo es una evolución natural y ahora cubre todos los aspectos creativos de Swarovski en su conjunto. Mi objetivo es darle al cristal una dimensión nueva, más genial e inteligente.
¿Qué significó esta primera colección como directora creativa?
Swarovski es un lugar donde la ciencia y la magia se encuentran. Hacer esta primera colección fue como ganar el boleto para Willy Wonka: no solo poder visitar la fábrica, sino mudarse y trabajar con esta magia todos los días. Al mismo tiempo, veo a Swarovski como la marca de joyería del futuro. Es neutral en cuanto al género y celebra la idea de un nuevo glamour para la era del confort. En este momento, estamos plantando la semilla para un mayor crecimiento en un espacio de género neutro. De esta manera, no hay límite para quién puede usar qué, o cómo, y esto deja espacio para la expresión de una manera increíblemente divertida.
Malú PandolfoConforme a los criterios deMás información
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