Más allá de la eficiencia: ¿cuáles son las 5 habilidades potenciadas por la inteligencia artificial?

La empresa Thomson Reuters publicó su informe Future of Professionals 2025, que revela una brecha significativa entre las organizaciones que adoptaron una estrategia de inteligencia artificial (IA) y aquellas que no lo han hecho.
El estudio, que recoge las opiniones de 2.275 profesionales de diversos sectores a nivel global, subraya que las empresas con una estrategia de IA definida tienen el doble de probabilidades de experimentar un crecimiento en sus ingresos y 3,5 veces más posibilidades de obtener beneficios sustanciales de esta tecnología.
A pesar de estas ventajas, solo el 22% de las empresas encuestadas cuenta con una estrategia de IA visible, lo que sugiere que un gran número de organizaciones podría estar desaprovechando las oportunidades que ofrece la integración estratégica de la IA.
Rodrigo Hermida, vicepresidente de profesionales legales para América latina y tributarios para el sur de la región en Thomson Reuters, analizó los resultados de este informe y su impacto en la siguiente entrevista de iProfesional.
-El informe «Future of Professionals 2025» de Thomson Reuters destaca que el 80% de los profesionales cree que la IA tendrá un impacto alto o transformador en su profesión en los próximos cinco años. ¿Qué fuerzas impulsoras detrás de esta creencia son las más significativas en su opinión, particularmente en el contexto de América latina?
-En Argentina ese entusiasmo es aún mayor, del 84%, lo que indica que los profesionales en nuestro país demuestran una apertura al cambio tecnológico y a la transformación digital aún mayor que sus pares en otros países del mundo.
Luego del primer «boom» proveniente del lanzamiento inicial, los profesionales comenzaron a adoptar inteligencia artificial en sus profesiones y en sus vidas, perdiendo de esta forma el miedo inicial y comenzando a ver impactos positivos provenientes de su uso.
Adicionalmente, observamos una alta capacidad de resiliencia por parte de los profesionales, acostumbrados a adaptarse a entornos altamente volátiles y en constante evolución, y un enfoque proactivo en nuestra región a adoptar IA con el fin de mejorar la eficiencia y la eficacia en los flujos diarios de trabajo.
-¿Cuáles son los mayores riesgos para las organizaciones en América latina que no desarrollan una estrategia de IA clara?
-Uno de los principales hallazgos del reporte este año es que las empresas que adoptan una estrategia visible de IA perciben el doble de probabilidades de alcanzar retornos de inversión mayores.
Por el contrario, quienes no tengan una estrategia perciben un retorno de inversión limitado. Una adopción de IA en tareas periféricas y no centrales a la estrategia organizacional limita las capacidades de ver beneficios en términos de ingresos, eficiencia y efectividad.
Sin embargo, más allá de los ingresos, el mayor riesgo es la erosión de la confianza. Cuando se incorporan tecnologías como IA generativa al trabajo de los profesionales, la confianza es fundamental. Nuestros clientes nos comparten a diario que sus clientes exigen un producto de trabajo de la más alta calidad y, a su vez, esperan precisión y confianza de las soluciones que utilizan.
Desde el punto de vista operativo, un enfoque informal de adopción de IA crea vulnerabilidades de seguridad y resultados inconsistentes que pueden dañar la reputación de una organización. Adicionalmente, también existen riesgos asociados a la atracción y retención del talento frente a la imposibilidad de aplicar estas tecnologías en sus trabajos.
Rodrigo Hermida
-El informe menciona que los profesionales que usan IA podrían ahorrar 5 horas a la semana, lo que se traduce en un valor anual de 19.000 dólares por persona. ¿De qué manera se puede maximizar este ahorro de tiempo y convertirlo en un valor tangible para la organización y sus clientes?
-La verdadera oportunidad se extiende más allá del ahorro de tiempo. Si bien estas horas liberadas son finitas, las ganancias de productividad de la implementación estratégica de inteligencia artificial pueden ser potencialmente ilimitadas. La clave está no sólo en automatizar tareas repetitivas, sino en rediseñar procesos completos y reasignar el tiempo hacia actividades de mayor valor agregado como el análisis estratégico, la atención personalizada al cliente y el desarrollo de nuevos servicios.
El valor real se materializa cuando las organizaciones alinean estratégicamente la adopción de IA con su propósito y objetivos de negocio, y empoderan a sus colaboradores para que se conviertan en «profesionales potenciados por IA«, capaces de ofrecer servicios más sofisticados a sus clientes.
-El informe introduce la «pirámide de éxito de la IA», que incluye las capas de estrategia, liderazgo, operaciones y usuarios individuales. En su experiencia, ¿qué tan alineadas están estas cuatro capas en las empresas de la región hoy?
-Todavía vemos un potencial enorme para aprovechar la IA con éxito a nivel organizacional en nuestra región. Por ejemplo, el 82% de quienes tienen objetivos personales de IA en América latina desconocen la estrategia de su organización, adoptando tecnología sin una orientación clara. Por el contrario, 14% de las organizaciones con estrategia formal reportan que sus colaboradores no tienen objetivos personales definidos. Este desfasaje entre los niveles estratégicos e individuales limita la posibilidad de aprovechar los beneficios de la IA a nivel organizacional.
En nuestra región percibimos un uso individual alto, que, combinado con una tasa baja de inversión y falta de estrategia clara, expone a las organizaciones a un riesgo mayor producto de la adopción informal y desestructurada. Sin embargo, el alto optimismo de los profesionales sobre la tecnología, la capacidad profesional de nuestros talentos y la apertura a la innovación presentan un terreno de grandes oportunidades para el desarrollo tecnológico en América latina.
-¿Qué tipo de roles o áreas deberían crearse o potenciarse con los recursos liberados por la automatización de la IA?
-El mercado de trabajo se mueve a un ritmo sin precedentes. La fluidez técnica se está convirtiendo en la línea de base y el verdadero diferenciador no será sólo usar las herramientas, sino saber por qué las estás usando. Por eso, el informe destaca que las organizaciones están contratando especialistas en operaciones, experiencias de cliente, innovación y transformación, tecnología e IA, desarrollo de marketing y negocios, entre otros roles.
La capacidad de aplicar las herramientas estratégicamente para resolver problemas complejos es el verdadero diferenciador para los profesionales. Por eso, las organizaciones necesitan invertir en entrenamiento y capacitaciones, para desarrollar nuevas habilidades e impulsar las existentes hacia un nuevo nivel. Hay algo que está claro y es que todos -o casi todos- los roles podrán potenciarse al complementarse con inteligencia artificial generativa.
-¿Cómo pueden los líderes de hoy en día inspirar confianza y mitigar la resistencia al cambio, especialmente cuando los profesionales aún pueden tener preocupaciones sobre la privacidad y la seguridad de los datos?
-La adopción de la IA requiere educar a los profesionales sobre lo que la IA puede y no puede hacer, así como también el nivel de supervisión humana a ser aplicado -medio, alto o bajo- según la tarea que se trate y la criticidad de esta. Esto es clave para asegurar la calidad del entregable.
Es cierto que la privacidad y la seguridad de los datos, así como el «miedo» a perder el trabajo son factores que generan resistencia. Según el informe, las organizaciones cuyos líderes lideran con el ejemplo son hasta 1,7 veces más propensas a capturar beneficios de la IA.
En Thomson Reuters, trabajamos dentro de un riguroso conjunto de principios éticos de datos e IA para promover y garantizar la confiabilidad en el diseño, desarrollo e implementación de IA y uso de datos, brindando los estándares de precisión y seguridad que nuestros clientes esperan. La implementación jamás puede superar la gobernanza.
-Además de la eficiencia y la productividad, ¿qué otras habilidades blandas o de «pensamiento superior» se vuelven más importantes con la IA?
-Nuestro informe destaca cinco habilidades que se verán potenciadas por IA:
- Habilidades organizacionales y de eficiencia, vinculadas a la gestión de proyectos y la flexibilidad.
- Habilidades técnicas, que permitirán impulsar el conocimiento al analizar grandes cantidades de información rápidamente.
- Habilidades prácticas, como la investigación y la escritura, potenciadas por la capacidad de la tecnología para avanzar rápidamente con borradores o edición de texto.
- Habilidades de alto nivel como pensamiento crítico, resolución de problemas y visión estratégica y finalmente de efectividad interpersonal, que incluyen la comunicación y el liderazgo.
De cualquier forma, es importante señalar que la IA no viene a reemplazar las habilidades sino a potenciarlas.
-La investigación señala que el 46% de los profesionales reporta brechas de habilidades en sus equipos, principalmente en tecnología y datos. ¿Qué estrategias de «recapacitación» demostraron ser las más efectivas para cerrar esta brecha, especialmente para las generaciones más experimentadas como los Baby Boomers o la Generación X?
-Más de la mitad de los profesionales en nuestra región (53%) reporta brechas de habilidades en sus equipos. Siguiendo el informe, el factor de éxito probado para dominar IA es combinar métodos de aprendizaje: lectura estructurada (87%), experimentación práctica (77%) y aprendizaje informal entre pares (76%).
A esto se suma un impulsor clave dentro de las organizaciones: identificar y dar a conocer casos de uso prácticos y concretos que demuestren impactos reales en la operación. Cuando los equipos ven resultados tangibles, la adopción se acelera y se produce un efecto contagio positivo.
Para Baby Boomers y Generación X, el enfoque debe ser mixto y práctico: entrenamientos activos con entornos seguros de prueba y espacios de colaboración donde se definan casos de uso y buenas prácticas.
El informe muestra que la generación de Baby Boomers declara un menor dominio de IA y menor participación en formación específica, mientras que la Generación X exhibe más involucramiento en entrenamientos que incluso supera al de generaciones más jóvenes. Por eso adaptar formatos (presenciales, guiados, aplicados al trabajo) y combinar metodologías permite acelerar la recapacitación y puede ayudar a cerrar la brecha.
-¿Cómo cree que la adopción generalizada de asistentes de IA cambiará la naturaleza del trabajo y las expectativas de los clientes?
-La transformación producto de la IA ya está en marcha y la naturaleza del trabajo está evolucionando a pasos agigantados. Los profesionales deben navegar entornos cada vez más complejos donde predomina la incertidumbre, las regulaciones se modifican día a día y el compliance moderno exige respuestas rápidas y una gestión fluida de la información.
Toda la cadena de valor, desde gobiernos, reguladores, proveedores y clientes, demandan respuestas más eficientes y en tiempo real. La tecnología, y la IA en particular, permiten simplificar el análisis para la toma de decisiones y adelantarse a las necesidades de un mercado cada vez más exigente. En ese sentido, en Thomson Reuters, nuestra misión es muy clara: apoyar a nuestros clientes a navegar esta complejidad con tecnología de nivel profesional y contenidos de confianza.
Este punto es clave, ya que las herramientas de uso genérico no garantizan contenido especializado, protección de datos ni funcionalidades adaptadas a flujos de trabajo profesionales. En cambio, las soluciones de nivel profesional están diseñadas por y para expertos, con estándares de seguridad, integraciones a procesos complejos y entrenamiento específico por industria. La diferencia es crítica: elegir herramientas de nivel profesional es determinante para capturar valor con responsabilidad.
En definitiva, la IA permitirá transformar la naturaleza del trabajo hacia uno más creativo y estratégico, con capacidad de anticipación frente a las demandas externas y con ciclos de respuesta más cortos, más precisión en el análisis y la gestión de información, y una personalización superior en la experiencia del cliente.
-Existe un riesgo notable de una «sobreconfianza en la tecnología a expensas del desarrollo de habilidades profesionales». ¿Cómo pueden los profesionales equilibrar la dependencia de las herramientas de IA con la necesidad de mantener y desarrollar su propio criterio y experiencia?
-Efectivamente, el informe alerta sobre el riesgo de la «sobreconfianza»: 24% teme que el buen desempeño de la IA frene el desarrollo profesional y 91% exige a las máquinas estándares de precisión más altos que a las personas.
En nuestra visión, la IA es un acelerador, en lugar de un reemplazo de los profesionales. Las personas en el centro es un pilar fundamental para una adopción exitosa de la IA, pues garantiza la calidad del entregable final. La dependencia puede existir en términos de aceleración de los análisis, facilitar los resúmenes y agilizar alguna tarea, pero el mayor valor agregado seguirá siendo siempre el servicio humano.





