Nueva edición del Festival La Mujer y el Cine, pese al marco desfavorable

El Panorama Nacional incluye 22 largometrajes y hay 33 cortos en competencia, con el federalismo como rasgo distintivo.
Llevar 31 películas a la pantalla grande no es poca cosa en un contexto en el cual el desmantelamiento del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) se ha convertido en un acto deliberado de la gestión mileísta, y abundan las dificultades para producir, distribuir y exhibir creaciones audiovisuales de realizadores argentinos en el territorio y a nivel internacional. En este marco se llevó a cabo la conferencia de prensa para anunciar la 37° edición del Festival La Mujer y el Cine, que se desarrollará con entrada libre y gratuita, del miércoles 24 al domingo 28 de septiembre, en cinco sedes de CABA: el Centro Cultural Recoleta (Junín 1930), Amigos del Bellas Artes (Figueroa Alcorta 2270), MALBA (Figueroa Alcorta 3415), las salas 5 y 6 de Atlas Patio Bullrich (Av. del Libertador 750) y el Centro Cultural 25 de Mayo (Triunvirato 4444).
En la bellísima sala de DAC (Directores Argentinos Cinematográficos), parte del staff del festival presentó la programación y las actividades destacadas: Annamaría Muchnik (directora), Vanina Spataro (productora general), Sabrina Farji (relaciones institucionales), María Victoria Menis (directora de Work in Progress), Blanca Monzón (curadora de Work in Progress) y Victoria Carreras (encargada de la conducción de la ceremonia y la premiación). «Estamos muy emocionadas. No ha sido fácil llegar hasta acá. Nuestras fundadoras estarían muy contentas de ver hoy este resultado. Hemos vivido de desafío en desafío y acá estamos», destacó Muchnik, y agradeció tanto los apoyos institucionales como el respaldo de los sponsors que posibilitan la edición.
También recordó que en los inicios del festival las realizadoras mujeres podían contarse con los dedos de una mano; hoy, afortunadamente, la realidad es muy distinta: las directoras son muchas y su talento es requerido en eventos nacionales e internacionales. Spataro destacó la potencia de la imagen de este año –un collage de Zoe Trilnick sobre fotografías de Dorothea Lange– y habló del concurso «estrella» de cortometrajes resaltando el federalismo: se presentaron cerca de 200 cortos y habrá 33 en competencia. «Puede verse el crecimiento del lenguaje de las directoras, el cine nacional va creciendo y tiene una voz propia», celebró la productora, y anunció que el jurado estará conformado por María Alché, Lorena Vega y Sebastián De Caro además de Menis y la propia Spataro.
Monzón habló de otra sección histórica, el Panorama Nacional, que este año incluye 22 largometrajes entre los cuales hay títulos recientes y producciones que ganaron el Work in Progress de ediciones anteriores. Entre los primeros figuran La quinta (Silvina Schnicer), L’addio -El adiós (Toia Bonino), El verano más largo del mundo (Alejandra Lipoma y Romina Vlachoff), Senda India (Daniela Seggiaro), Corazón embalsamado (Juli Seco), Todas las fuerzas (Luciana Piantanida), Manuelita, ¿dónde estás? (Deborah Narváez), La llegada del hijo (Cecilia Atán y Valeria Pivato), La noche sin mí (Laura Berch y Laura Chiabrando), La danza del impacto (Camila Toker), Antes del cuerpo (Carina Piazza y Lucía Bracelis), Ciclón fantasma (Diana Cardini), Los cuerpos públicos (Valeria Sartori) y Legerin en busca de Alina (María Laura Vázquez). Entre las ganadoras del WIP figuran Boletín interno (Meri Franco Mao), Cuidadoras (Martina Matzkin y Gabriela Uassouf), Medea (Lara Seijas), Wacay, mujeres del tabacal (Belén Revollo), La hija del no (Silvina Hermosa), Mala sangre (Gisela Sánchez), Tierra Citrus (Ayelén Agüero) y El sueño imposible (Paula Romero).
Un rasgo a destacar en la programación es el federalismo: entre las producciones hay realizadoras salteñas, catamarqueñas, jujeñas, mendocinas y marplatenses. Por razones económicas, el ciclo se movió de mayo a septiembre, así que no habrá tantos estrenos como otros años, pero Monzón aseguró que desde la organización están «muy conformes con la muestra», y apeló a ese «público cautivo» que ya es habitué del festival y puede llegar a ver tres o cuatro películas en un mismo día. Para ellos se pensó un corredor que facilite la circulación entre las sedes. Otro dato que señaló la curadora es la gran cantidad de documentales que se presentaron este año, algo que «tiene que ver con una realidad política y económica».
Menis comentó que desde la organización había un gran deseo de contribuir con la producción de películas, así que decidieron «contactarse con los mejores profesionales de la industria y con las universidades para pedir colaboración». Por lo general, los Work in Progress del exterior suelen premiar una sola película; en este caso, a los sponsors les gusta premiar casi todos los proyectos que se presentan. «Eso es bello porque todos reciben un incentivo, hay premios para la distribución, la post-producción, la comercialización», señaló. Algunos films se estrenaron en la Argentina, otros en festivales internacionales como los de San Sebastián, La Habana o Toulouse. «La Mujer y el Cine colaboró con esas películas y es una sensación muy linda», celebró Menis y compartió sus ganas de lanzar una campaña para hacer cumplir la ley que establece la proyección de un corto antes de los largos: «El cortometraje tiene muy poca exhibición en la Argentina, muy pocas pantallas –diagnosticó–. Los que hay acá son de primerísima categoría y merecen estar en cines comerciales».
Luego de la conferencia se proyectó la notable película dirigida por la española Isabel Coixet, Un amor (basada en la novela homónima de Sara Mesa), que podrá verse el sábado 27 a las 18 en el MALBA. Nat –interpretada con gran solidez por Laia Costa– huye de la vida ubana y de un trauma, se refugia en el pueblo de La Escapa y allí deberá lidiar con la sospecha permanente de sus vecinos y la condición infernal que aloja todo pueblo chico. «Es una película que hace sentir y discutir. Espero que no os deje indiferentes», expresó la propia Coixet en un breve video. Farji comentó la programación del Panorama Internacional, que se completa con Memoria de un cuerpo que arde (Antonella Sudasassi Furniss, Costa Rica), Senhoritas (Mykaela Plotkin, Brasil), La falla (Alana Simões, México), Salve Maria (Maria Coll, España) y Mientras seas tú (Claudia Pinto, España). «Son películas muy importantes porque han marcado la cinematografía del año en que se estrenaron y no tienen distribución acá así que las van a poder ver por única vez con entrada libre y gratuita. Es un privilegio», subrayó Farji.
Además, este año se inaugura «Une femme est une femme», un ciclo muy atractivo dedicado a las matriarcas del cine francés. «Creemos que es fundamental volver a las bases para que se conozca la obra de Agnès Varda con Cleo de 5 a 7 o Marguerite Duras con Indian Song«, destacó la directora, e invitó especialmente a la proyección de los trece cortos de la pionera Alice Guy con música en vivo a cargo de María Ezquiaga y
Lorena Mayo, una actividad especial que sucederá el viernes 26 a las 19 en Amigos del Bellas Artes. Carreras trazó un arco temporal desde aquellas mujeres que cargaban cajas con rollos de celuloide en los inicios del festival hasta las directoras jóvenes de hoy que deciden empuñar un celular para crear sus obras. De esta manera invitó a la sección Videominutos, que en esta edición contará con 21 piezas breves donde la síntesis y la creatividad se funden de manera virtuosa.
*Más información en lamujeryelcine.org.ar