El mundo reaccionó a las tensiones entre Israel e Irán

Distintos países hicieron este viernes llamados generalizados a Israel e Irán para que desescalen la tensión y privilegien la vía diplomática en la resolución de sus disputas, tras el ataque en suelo iraní ordenado por el gobierno de Benjamin Netanyahu contra el programa nuclear de Teherán, que fue respondido con disparos hacia territorio israelí. Rusia, Brasil y la Liga Árabe, entre otros, repudiaron a Israel, mientras que los gobiernos de Estados Unidos, Reino Unido, Alemania y Francia lo apoyaron argumentando que tiene derecho a la legítima defensa.

La postura de Rusia y China

El presidente ruso, Vladimir Putin, condenó el ataque israelí contra la cúpula militar de Irán y sus instalaciones nucleares durante una conversación telefónica con el líder iraní, Masud Pezeshkian. «Putin subrayó que Rusia condena las acciones de Israel realizadas en violación de los estatutos de la ONU y el derecho internacional», señaló la presidencia rusa en un comunicado. 

«La parte rusa apoyó por todos los medios los esfuerzos para el arreglo de la situación en torno al programa nuclear iraní por la vía pacífica, presentando iniciativas concretas encaminadas a encontrar acuerdos mutuamente aceptables», indicó, además de destacar que Moscú seguirá contribuyendo a la desescalada entre iraníes e israelíes.

En otra conversación con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el líder del Kremlin pidió por una solución al conflicto por medios político-diplomáticos y además «expresó la disposición a ofrecer servicios de mediación con el fin de no permitir una nueva escalada de la tensión».

China por su parte pidió a las partes implicadas que eviten una escalada del conflicto en Medio Oriente. «China sigue de cerca los ataques de Israel contra Irán y está profundamente preocupada por las posibles consecuencias graves de estas acciones», declaró el portavoz del ministerio de Exteriores Lin Jian en una rueda de prensa en Beijing.

El representante chino subrayó que su país se opone a cualquier acción que infrinja la soberanía, la seguridad o la integridad territorial de Irán, así como a aquellas que agraven las tensiones y amplíen el problema. «Una intensificación repentina del conflicto no favorece a ninguna parte», advirtió Lin, además de expresar la disposición de Beijing a desempeñar un papel constructivo para frenar la escalada y facilitar la distensión, en línea con su postura tradicional de neutralidad activa en los conflictos de la región.

El apoyo a Israel

En un principio el secretario de Estado norteamericano, Marco Rubio, había desligado a Estados Unidos de la ofensiva israelí, y la calificó como una medida unilateral realizada para defenderse. Aún así, Washington ayudó a Israel a interceptar ataques con misiles lanzados desde Irán contra ese país, confirmó a la agencia EFE una fuente oficial estadounidense. El ministro alemán de Exteriores, Johann Wadephul, también condenó enérgicamente el ataque que lanzó Teherán contra Israel. 

El primer ministro británico, Keir Starmer, conversó con Netanyahu y le dijo que le preocupa dicho programa. «El primer ministro fue claro al afirmar que Israel tiene derecho a la legítima defensa y expuso las graves preocupaciones del Reino Unido sobre el programa nuclear de Irán», informó el gobierno inglés en un comunicado. El presidente francés, Emmanuel Macron, también subrayó que Israel tiene derecho a protegerse y a garantizar su seguridad, al tiempo que afirmó que su país está dispuesto a trabajar con todos sus socios para una desescalada en Medio Oriente.

Las respuestas latinoamericanas

En una nota oficial divulgada por el ministerio de Relaciones Exteriores, el gobierno de Brasil consideró el bombardeo israelí como una clara violación a la soberanía del país persa y al derecho internacional. Al igual que otros países, llamó a un cese inmediato de las hostilidades. El Ejecutivo de Luiz Inácio Lula da Silva ha sido muy crítico con la campaña militar que Israel desarrolla en la Franja de Gaza desde los ataques de Hamas del 7 de octubre de 2023. Lula calificó de «genocidio» los constantes bombardeos e incursiones terrestres del ejército en el territorio palestino.

Colombia en tanto señaló en un comunicado de la Cancillería que su gobierno hace un llamado a la moderación y al respeto de los canales diplomáticos para avanzar hacia una solución pacífica y duradera en la región. El presidente Gustavo Petro rompió relaciones con Israel, un importante socio comercial y en materia de seguridad del país, el 1 de mayo de 2024 debido a la operación militar en Gaza, que al igual que Lula tildó varias veces de «genocidio».

Venezuela emitió una declaración oficial condenando categóricamente la ofensiva militar israelí, calificándola como una «agresión criminal», informó el canal Telesur. El presidente boliviano, Luis Arce, también repudió al gobierno israelí. «Expresamos nuestra profunda solidaridad con el hermano pueblo y el Gobierno de Irán, y hacemos votos por el pronto restablecimiento de la calma», señaló en la red social X.

Por el contrario, el gobierno de Paraguay respaldó a Israel. «El Paraguay manifiesta su firme apoyo a Israel y al derecho de defender su existencia, al tiempo de hacer un llamado a la paz en la región», publicó el ministerio de Relaciones Exteriores en su cuenta de la red social X.

El gobierno de Uruguay hizo un llamado a sus homólogos de Israel e Irán a evitar acciones que puedan desestabilizar la región y la Cancillería chilena subrayó en un comunicado que bajo ninguna circunstancia las instalaciones nucleares deben ser objeto de ataques, en referencia a los objetivos destruidos fijados por los israelíes.

También hubo acción en el Consejo de Seguridad de la ONU, donde sus 15 países lanzaron sin excepción llamamientos generalizados a Israel e Irán a desescalar la tensión y privilegiar la vía diplomática para resolver sus disputas, aun con distintos matices.

En general, los países africanos y asiáticos criticaron la acción «unilateral» de Israel en sus ataques a Irán y su «desprecio» por la carta de la ONU y la soberanía de otros Estados, mientras que los países europeos y EE.UU. subrayaron el peligro que supone el programa nuclear iraní, que fue la razón invocada por Israel para lanzar sus ataques ayer por la madrugada.

«Solidaridad con la República Islámica»

La Liga Árabe repudió los ataques de Israel. «La Secretaría General de la Liga Árabe condena los ataques israelíes contra territorio iraní y afirma que constituyen una flagrante violación del derecho internacional», dijo la entidad panárabe, con sede en El Cairo, en un comunicado. «Exigimos una intervención decisiva e inmediata de la comunidad internacional para detener estos ataques, que amenazan con conmover a la región, así como la necesidad de contener la escalada y evitar que la situación se descontrole», agregó.

El portavoz de las Brigadas de al Qasam, brazo armado de Hamas, Abu Obeida, lamentó las muertes producidas en el bombardeo israelí, entre los que se encuentra el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Teherán, el general Mohamad Hosein Baqerí, así como el comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria de Irán, el general Hossein Salamí.

«Declaramos nuestra solidaridad con la República Islámica de Irán ante la brutal agresión sionista, que se debe principalmente a su apoyo al pueblo palestino y a su gran apoyo a su honorable resistencia», recoge un comunicado difundido por sus canales. «El enemigo sionista se engaña por completo si cree que estos ataques traicioneros pueden socavar los frentes de resistencia o consolidar los cimientos de esta frágil entidad en la región», advirtió Hamas.

El grupo chiita libanés Hezbolá, aliado clave de Teherán, alertó que Israel cruzó «todas las líneas rojas» con sus ataques. «Todos los esfuerzos hechos en el último periodo para preservar la estabilidad y seguridad de la región han sido socavados y abortados por el Gobierno del enemigo, exponiendo la seguridad regional e internacional a graves riesgos que podrían llevar a consecuencias indeseables», advirtió la formación en un comunicado.