El teatro es un registro colectivo y singular

El director y dramaturgo, y el actor hablan de «El acomodador, memoria de un oficio», una pieza teatral «entre lo biográfico y lo ficcional» que puede verse los sábados en el Payró.
“En estos días tan raros, demenciales, en que todo tiene que ser único, útil y descomunal, la existencia de este escenario resulta una proeza, un gusto que todavía podemos darnos entre nosotros”, reflexiona el protagonista de El acomodador, memoria de un oficio, obra de Alfredo Martín que bajo su propia dirección interpreta Marcelo Bucossi acompañado por Rosana López. La obra se ofrece en el Teatro Payró, un lugar ideal para hablar del teatro independiente, tanto por su historia fundacional como por el aporte que brinda el propio espacio a la estética de cada obra, tal como destacan actor y director en conversación con Página/12.
El año pasado, al cumplirse 50 años del debut teatral de Bucossi, el actor le propuso a Martín (director y actor con quien ya estrenó 14 obras) que podrían hacer hacer algo al respecto. A pesar de que la primera respuesta que recibió fue una humorada (“Un auto homenaje puede ser algo patético”) finalmente entre los dos encontraron “el lugar singular desde donde hacer este muestreo de fragmentos, entre lo biográfico y lo ficcional”, según cuenta el director. Antes de seleccionar los textos entre todas las obras que Bucossi llevó a escena desde sus 16 años decidieron que el personaje que los interpretaría sería un acomodador, que luego de ubicar al público y ante la ausencia de la compañía que debería actuar esa noche se ofrece a matizar la espera contando anécdotas de su oficio y también interpretando algunos textos aprendidos a lo largo de su trayectoria.
Así surgió la figura de Miguel, un acomodador a punto de jubilarse que a ambos les hizo evocar a aquellos que conocieron en cines y teatros de sus lugares de origen (Martín nació en Corrientes, Bucossi, en Chacabuco, provincia de Buenos Aires), todos ellos corteses y profesionales, “verdaderos mediadores entre el público y los artistas”. “Hubo que trabajar especialmente el hecho de que Miguel no tiene formación actoral» ”, cuenta el director, “ así que su interpretación viene con olvidos y confusiones, aunque sí con el alma y desde el cuerpo”.
Los autores elegidos son muy variados: Vacarezza, Ibsen, Pessoa, Shakespeare, entre otros. Tiene un lugar preferencial Haroldo Conti, autor chacabuquense como el actor, a partir de fragmentos de Lo que llevo de ausencia, el espectáculo unipersonal que Bucossi estrenó digido por Martín. Así, el texto de A la diestra, el que fue encontrado en la máquina de escribir después de que fuera secuestrado su autor, antecede al “canto de una marcha, un acto colectivo, que va desde el recuerdo tomando vuelo, como el mismo espectáculo”, según compara el director.
“En mi cuerpo quedaron impregnadas las marcaciones de los directores, la musicalidad de los textos y el modo de decirlos”, asegura Bucossi, quien también rinde un homenaje a Alejandra Boero, con un fragmento del último espectáculo que ella estrenó, De versos rebeldes, donde el actor compartió escenario con ella, una de sus maestras.
-La figura del acomodador ya no tiene el relieve de años atrás…
Alfredo Martín :-Es un oficio en vías de extinción. Y eso es lamentable, porque acompaña y prepara a los espectadores para lo que van a ver, es decir que los pone en situación de expectar. Otra línea de este hilvanado que fuimos pensando fueron los comentarios del antes y el después de una función…
Marcelo Bucossi: -Y en cómo este acomodador observa las reacciones del público mientras se está viendo una obra.
A.M.: -Y esto nos hizo pensar en lo que las obras despiertan en cada espectador, porque el teatro es un registro colectivo pero también un registro singular que hasta llega a teñir la vida de una persona.
-¿Cómo entra el personaje de Sandra, la boletera?
A.M.:-Decidimos incorporarla porque en el mundo del teatro también está en las sombras, tan invisibilizada como el acomodador. Con su actuación, Rosana López logra dinamizar esa serie de recuerdos para que en ningún momento se caiga en la tristeza o la melancolía.
M.B.:-Y cuidando también que el humor tampoco supere lo dramático…
-También se habla de los rituales de los elencos antes de cada función…
A.M.:-También el acomodador está al tanto de lo que hacen los elencos antes de cada obra. Es la manera que tienen los actores para entrar en la ficción: esos rituales son como huellas de posesión. Son el modo en que una persona se transforma en un artista.
*El acomodador, memoria de un oficio, en el Teatro Payró (San Martín 766), sábados 20 hs.