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Vélez hace un homenaje a dos hinchas desaparecidos

La memoria no es memoria si no es un acto colectivo y perdurable. Demasiadas memorias dieron vida a una epopeya de lucha y dignidad. La que empezaron Madres, Abuelas y Familiares con sus rondas a la Plaza de Mayo. Memorias que son enemigas del silencio cómplice, de la historia adulterada que nos quiso dejar la dictadura con su slogan en pleno Mundial ’78: “los argentinos somos derechos y humanos”. Historia malversada que hoy revive en un régimen de extrema derecha bajo la consigna de revisitar el pasado a bordo de un Falcón verde. El gobierno de Javier Milei y Victoria Villarruel se abraza a la nostalgia por el Terrorismo de Estado. En ése, su punto de contacto, no existen las fisuras que muestran en público.

Para resistir ese intento de sepultar políticas de Estado con amplio consenso hay anticuerpos. En Vélez, un club con fútbol y memoria -igual que muchos otros-, proyecto deportivo, social y educativo, la agrupación Fortineros Memoriosos sabe muy bien de qué se trata. A los libertarios con amnesia les molesta que se recuerde, y sobre todo cuando se hace en una sociedad civil sin fines de lucro.

Quieren reemplazar esa construcción más que centenaria con factorías del siglo XXI sin historia. Sociedades Anónimas que serían incapaces de evocar a Oscar Rubén De Gregorio Marconi y a Horacio Oscar Mérega. Al primero le decían El Sordo. Era sociólogo, padre de dos hijos, pasó por Descamisados y Montoneros, lo detuvieron en Colonia, Uruguay, escapó, lo hirieron de bala y terminó en la ESMA torturado hasta su muerte. Nunca aparecieron sus restos. El Cholo estudió en el Nacional Buenos Aires y Biología en la UBA. Perteneció a la promoción ’72 del prestigioso colegio de la UBA, militó en el Movimiento de Acción Secundaria (MAS), la UES y Montoneros. Cayó en un operativo cerrojo junto a su compañera Laura Mujica y Carlos Ocampo en Villa Adelina y nunca más se supo de los tres.

De Gregorio y Mérega fueron hinchas velezanos que pudieron disfrutar el primer título en la historia del club: el campeonato Nacional de 1968 con un jovencísimo Carlos Bianchi y las dos W de una dupla decisiva: el gol del Turco Wehbe y el talento de Daniel Willington.

El Sordo y El Cholo vivieron felices con y por los colores que habían elegido. Así dice en las dos baldosas que este sábado serán colocadas con sus nombres en las puertas del club, avenida Juan B. Justo 9200, a las 16. Son dos entre 30 mil. Pero además dos entre diecisiete en ese mundo cruzado por la ve azulada que atravesó sus infancias y adolescencias. El club registra esa cantidad de detenidos-desaparecidos hasta la fecha.

Son Delfor Santos Soto, Alfredo Mario García, Antonio Garuti Sacco, Rubén Daniel Marco, Clara Kierszenowics, Armando Prieto Alonso, Omar Aine Rojas, Susana Rosa Smile, Osvaldo Sposaro, Jorge Félix Pérez, Juan Carlos Rugilio, Alfredo José Cajide, Eduardo Salvide, Eduardo Garuti, Horacio Daniel Marceli y los dos militantes populares que serán recordados ahora por Fortineros Memoriosos.

Todos y todas recibieron su homenaje en el Fortín la noche del partido con Deportivo Riestra por la Copa de la Liga. Uno por uno los nombró la voz del estadio y los jugadores posaron con una bandera que sintetiza todo: Vélez tiene memoria.

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Fuente: Pagina12

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