Kueider pide que lo restituyan y la Justicia avanza con las investigaciones en su contra
Desde su prisión de lujo en Paraguay, Edgardo Kueider pidió la restitución de su banca mientras que la justicia argentina avanza con una investigación en su contra. Un día después de su expulsión, el entrerriano presentó un recurso de amparo ante la Cámara en lo Contencioso Administrativo para que se declare nula la resolución del Congreso. Paralelamente, la jueza federal Sandra Arroyo Salgado ordenó un allanamiento en su despacho en el Senado en el marco de la causa por enriquecimiento ilícito. Luego de destitución, la magistrada fundamentó la medida ante la posibilidad de dar con «elementos de prueba» para corroborar las «hipótesis delictivas bajo examen».
Desde su prisión de lujo en Paraguay, Edgardo Kueider pidió la restitución de su banca mientras que la justicia argentina avanza con una investigación en su contra. Un día después de su expulsión, el entrerriano presentó un recurso de amparo ante la Cámara en lo Contencioso Administrativo para que se declare nula la resolución del Congreso. Paralelamente, la jueza federal Sandra Arroyo Salgado ordenó un allanamiento en su despacho en el Senado en el marco de la causa por enriquecimiento ilícito. Luego de destitución, la magistrada fundamentó la medida ante la posibilidad de dar con «elementos de prueba» para corroborar las «hipótesis delictivas bajo examen».
Ayer, Kueider encontró un argumento en la pelea entre Javier Milei y Victoria Villarruel y se lanzó sobre él con la idea de perpetuarse en su cargo. El exsenador utilizó la polémica acerca de la sesión presidida por Villarruel e hizo una presentación judicial para pedir su anulación porque sostiene que al momento de votar, la vicepresidenta se encontraba en ejercicio del Poder Ejecutivo por el viaje del Presidente a Italia. Hizo el pedido ante el juez en lo contencioso administrativo federal Juan Gelly y Obes y reclamó, además, el dictado de una medida cautelar que, de manera provisoria, anule su expulsión del cuerpo hasta que se resuelva la cuestión de fondo.
En el escrito sostuvo que lo ocurrido el jueves en el Senado fue de una «ilegalidad manifiesta» porque no tuvo derecho a defensa, además de cuestionar el trámite por haber sido presidido por Villarruel. «La presidenta de la Honorable Cámara de Senadores pasó a ejercer el cargo de presidente a cargo, con lo cual no pudo y no debió como representante del Poder Ejecutivo en ejercicio, presidir la sesión que se impugna», cuestionó.
Kueider reclamó «declarar la inconstitucionalidad y subsidiariamente la nulidad de la sesión, su votación, su resolución y su lógica consecuencia» y le pidió a la Justicia que ordene al Senado que le permita ejercer «el debido derecho de defensa, se obtenga prueba legítima y se otorguen las más amplias facultades probatorias y de descargo». Y agregó: «Se ha removido a un senador nacional, electo por la voluntad popular de modo ilegítimo e inconstitucional, controvirtiendo la voluntad popular».
Mientras que Kueider se aferra a su banca desde Paraguay, en Argentina las causas en su contra siguen su curso. La jueza federal Sandra Arroyo Salgado ordenó ayer un allanamiento en el despacho del Senado en el marco de la causa por enriquecimiento ilícito. La resolución fue tomada luego de la expulsión del entrerriano que lo dejó sin fueros.
Ayer por la mañana, la magistrada envió el oficio para autorizar el allanamiento al presidente provisional de la Cámara alta, Bartolomé Abdala, debido a que Victoria Villarruel está a cargo del Poder Ejecutivo. En el documento, la jueza fundamentó la medida ante la posibilidad de dar con «elementos de prueba» para corroborar las «hipótesis delictivas bajo examen». Además, dispuso nuevos allanamientos en domicilios vinculados a Kueider en Entre Ríos, entre ellos el de su expareja y madre de dos de sus hijos, en la ciudad de Concordia.
Los operativos fueron realizados por Gendarmería Nacional y se suman a los que se hicieron el miércoles en 13 domicilios, entre ellos un departamento en el barrio porteño de Recoleta donde viviría la secretaria de Kueider, Iara Guinsel Costa, detenida junto con él en Asunción bajo arresto domiciliario por intento de contrabando de 211.000 dólares sin declarar. La mujer también está imputada en la investigación de Arroyo Salgado porque todo indica que era la persona encargada del pago de expensas en tres departamentos de un complejo en Paraná a nombre de una sociedad, Betuil, que sería de Kueider y cuya actividad se investiga.
Los allanamientos previos fueron en inmuebles que habitaba Kueider en ciudades entrerrianas. Uno fue en Paraná, en edificios de su propiedad y otros en Concordia, donde hay una vivienda que pertenecería a un familiar de Kueider. Ante de la sesión en la que se definió la expulsión de Kueider, Arroyo Salgado había pedido la extradición y detención de Kueider. También dictó una orden de detención internacional por medio de Interpol para Guinsel Costa.