Santiago Gómez Cora: «Queremos cambiarle el color a la medalla que ganamos en Tokio»
El bonaerense Santiago Gómez Cora, entrenador del seleccionado argentino de rugby seven, Los Pumas 7s –ganador de la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020–, afirmó que el equipo «quiere cambiarle de color a esa presea» en París y destacó el nivel de exigencia de sus dirigidos «por los resultados obtenidos este año», en el que finalizó en la primera posición en el circuito mundial.
«Hoy sí es una realidad que podamos pelear por una medalla. El equipo tiene hambre. Y más después del 2023 con grandes logros como títulos y un segundo puesto en el circuito, y este año, con el primer puesto en el circuito y varios logros. El ejercicio de vaciarnos y la humildad son claves y, sin dudas, queremos cambiarle el color a esa medalla», expresó el entrenador en diálogo con Página/12.
«Todas las preparaciones olímpicas son únicas. Creo que esta la particularidad que tuvo fue el nivel de exigencia con los resultados obtenidos. Creo que el ir en busca de esa mejora continua y los resultados obtenidos, fueron nuestro distintivo para París 2024», puntualizó Gómez Cora, de 45 años, un hijo y simpatizante de Banfield, exjugador y capitán de los Pumas seven entre 2000 y 2010 y entrenador desde 2013 a la actualidad.
–En 2020 ganaron la medalla de bronce. ¿Cómo es este nuevo proceso de cara a París?
–Sigue siendo nuestro motor el ejercicio de vaciarse que trabajamos continuamente. Lo que hicimos y obtuvimos es para hacer un chequeo de que si trabajo muy duro y mejoro todos los días, los resultados llegan. Nuestro propósito es realizarnos a través del equipo sabiendo que las medallas son los factores intermedios que nos van abriendo caminos, dando energía, sabiendo que es el camino. La medalla olímpica, hacer un podio es nuestra gran motivación y cambiarle el color es el sueño.
–¿Cuál es el objetivo en París, repetir lo de Tokio o subir peldaños en el podio?
–Nosotros queremos ganar todos los partidos que tengamos enfrente. Entrenamos para ser mejores cada día. Decir que vamos por un cuarto puesto, un quinto, no es nuestra realidad. Hoy es una realidad el hecho de poder estar en un podio. Hoy sí es una realidad que podamos pelear por una medalla.
–¿El equipo está con «hambre de más» de lo que obtuvo en Tokio?
–El equipo tiene hambre. Y más después del 2023 con grandes logros como títulos y un segundo puesto en el circuito, y este año, con el primer puesto en el circuito y varios títulos. El ejercicio de vaciarnos y la humildad son claves y, sin dudas, queremos cambiarle el color a esa medalla. Sabemos que romper los cuartos de final es lo más complejo. Lo pudimos hacer en los Juegos anteriores no así en la semifinal y hoy tenemos ganas de ir a buscar eso. Obviamente el primer paso que es clasificar, y creemos que estamos más aplomados en una situación de finales. Este cambio, con el equipo llegando competitivo, no te asegura que si saliste primero en el circuito vas a ganar el oro, pero sí que si entrás a instancias finales no te va a pesar tanto la pelota como nos pasó en instancias decisivas antes de estas experiencias positivas de estos últimos dos años.
–¿Está conforme con la preparación del equipo de cara a los Juegos?
–Sí, estoy muy conforme. Pase lo que pase estoy conforme con el recorrido y lo planeado. Después puede haber lesiones, suspensiones o rendimientos de jugadores que no estén en su mejor momento y eso no quita que la preparación haya sido óptima. Confío plenamente en los jugadores. El propósito del equipo es realizarnos a través del equipo: realizarnos como personas.
–¿Le costó definir la nómina de los doce jugadores que competirán en los Juegos Olímpicos?
–Siempre dar la nómina es muy complejo, fue difícil. La del circuito mundial es muy dinámica porque hay una lista por mes. Y esta es cada cuatro años y fue difíci. Siempre fuimos muy claros en las charlas que tuvimos durante todo el año en cuanto a las métricas para estar dentro del equipo. Y, a la vez, fue un lindo desafío tener el dolor de cabeza para armar la lista. Dámelo siempre. Duele, cuesta pero peor es no saber a quién llevar por no tener jugadores desarrollados. Es un lindo problema armar la lista de doce jugadores y cuando pasa eso es que el trabajo en el proceso fue bien realizado y eso fue lo que sucedió en esta lista.
–¿Cuanto pierde el equipo por la ausencia de Rodrigo Isgró en la primera fase de los Juegos y porqué decidió mantenerlo en la nómina definitiva?
–Su pérdida cuesta, duele desde ya, pero nosotros preparamos a 24 jugadores durante todo el año. Primero fueron rotando por rendimiento, después por lesiones. En este caso fue por una suspensión. Sabemos del peso de él, que viene jugando hace varios años con nosotros y lo que eso significa. Somos conscientes de lo que significa dentro de la cancha pero no nos va a desarmar nuestro plan de juego ni nuestra estructura ni mermar el rendimiento del equipo. Lo vamos a extrañar y si las cosas quieren que pasen estará disponible para fases finales. Es un jugador de mucho impacto, fresco, para las fases finales, si es que nos toca estar ahí.
–Los Pumas 7s integrarán la zona B junto con Samoa, Australia y Kenia. ¿Cómo describe a cada rival?
–Tenemos rivales de un ranking inferior, son todos los partidos muy parejos. Creo que hasta te traiciona un ranking inferior. Si me dan a elegir siempre prefiero a los mejores en zona. Sabemos que hay margen, qué podemos construir en la zona y que no tenemos que ir a causar un efecto sorpresa como fue el de Tokio. Kenia es un rival que va a estar sin ritmo de circuito. Es un equipo muy físico y fuerte. Tenemos que quitarle la posesión a ultranza porque son muy fuertes y manejan muy bien el punto de encuentro. Samoa es un equipo con menos recorrido; también muy físico. Es un rival complejo, con nada que perder. Y Australia sabemos lo duro y difícil que es. Va a ser una zona súper dura, difícil pero estamos confiados en poder superarla.
–Este año, por primera vez terminaron en la primera colocación en las posiciones del circuito mundial. ¿Qué considera que genera el equipo a los rivales?
–El equipo tuvo, sin dudas, el mejor año de la historia, por momentos nos complicó porque entramos a jugar con un peso extra, que nos supimos quitar de encima en el final. Sabemos que ahora todos nos quieren ganar, es más difícil, pero el respeto obtenido es muy lindo, así que dámelo siempre.
–¿Qué equipos considera que pelearán por las medallas?
–Para mi los mejores equipos del mundo siempre son Nueva Zelanda y Fidji y siempre son candidatos, aun no ganando en algún juego olímpico o en alguna etapa del circuito. Siempre son protagonistas, los equipos que todos quieren ver; los que juegan más lindo, los que históricamente protagonistas del juego y después entre Australia, Francia, Sudáfrica y Argentina metida en ese lote creo que son los candidatos a estar en zona de podio.