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el plan de Massa para meter a la oposición en el barro

La modificación del Impuesto a las Ganancias impulsada por el ministro de Economía, Sergio Massa, forma parte de un paquete de medidas con las que el candidato presidencial del oficialismo busca mantener a flote su campaña y a la vez abrir debates en el Congreso que incomoden a la oposición por el costo político que podría tener un eventual rechazo a proyectos relacionados con el bolsillo de los votantes.

Además del proyecto referido al cambio en Ganancias, Massa envió a la Cámara de Diputados otra iniciativa que plantea una reducción de las contribuciones patronales del 100% para las Pymes que contraten beneficiarios de planes sociales y jóvenes de entre 18 y 25 años que ingresen por primera vez al mercado laboral. El oficialismo quiere darle dictamen esta semana y apurar su votación en el recinto.

Más allá de ser medidas con un claro sentido electoralista, tomadas cuando el candidato de Unión por la Patria necesita surfear la grave crisis inflacionaria para no verse corrido de la carrera por el libertario Javier Milei y la postulante de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, la intención política tiene más que ver con meter a esos referentes de la oposición en el barro del debate económico.

Esa discusión complica más a Massa por ser el ministro y el candidato del Gobierno, pero al llevar temas como Ganancias y empleo Pyme al Congreso el oficialista obliga a la oposición a tomar postura sobre cuestiones sensibles en el marco de una crisis económica que, como parte de la campaña electoral, todos prometen resolver.

Cuál es el plan de Massa detrás de los proyectos sobre Ganancias y empleo Pyme

«Van a tener que demostrar si realmente están de acuerdo con que un trabajador siga pagando Ganancias o con incorporar más gente al empleo formal», deslizó a iProfesional un operador oficialista en referencia a Juntos por el Cambio y también a Milei al ser consultado por los debates que empiezan a abrirse en el Congreso.

Al menos una parte de la oposición evalúa acompañar alguna de estas medidas, según supo este medio, pero sin dejar de discutir sobre la estructura impositiva del país y de cargarle la responsabilidad por la crisis a Massa. No obstante, la idea del candidato de llevar estas discusiones a esa caja de resonancia que es la Cámara de Diputados es casi una trampa.

Massa busca marcarle la agenda a la oposición en el Congreso con debates económicos de posible impacto electoral 

Y es que, en caso de votar a favor, el crédito político se lo llevará el ministro-candidato por ser el autor de las medidas. Si bien esto no le garantiza un crecimiento electoral ni mucho menos un triunfo, sirve a su campaña y puede ser útil para el objetivo de ir a buscar a los votantes decepcionados con el Gobierno que se abstuvieron en agosto.

En tanto, si la oposición votara en contra de estos proyectos, ni los argumentos técnicos ni la eventual acusación al ministro-candidato de hacer demagogia impedirían que todo Unión por la Patria explote ese rechazo en la campaña, con sentencias como «ellos solo proponen ajuste», algo que Massa ya ha dicho en otras oportunidades.

Así, tanto el tema Ganancias como el de empleo Pyme no le aseguran a Massa el éxito en las elecciones presidenciales de octubre pero le sirven para su campaña por tratarse de medidas populares -en el sentido de que ningún trabajador o pequeño empleador estaría en contra- que le permiten mantener alto su perfil y a su vez poner a sus rivales en una situación incómoda.

El desafío del ministro-candidato a la oposición en plena campaña

Si bien el oficialismo, que no tiene mayoría propia en el Congreso, puede conseguir aliados para avanzar con estos temas, la posibilidad de que Milei o el interbloque de Juntos por el Cambio se opongan (en especial en el tema de Ganancias) es contemplada por Massa como un posible beneficio para su campaña.

Por esa razón, al anunciar el proyecto durante el acto que le organizó la CGT en Plaza de Mayo, el candidato-ministro desafió: «Esperamos que aquellos opositores que hoy no nos permiten cobrarle impuestos a quienes tienen su plata en el extranjero, al menos se dignen a aceptar que los trabajadores no paguen más el Impuesto a las Ganancias».

Además, chicaneó al PRO con una alusión al ex presidente Mauricio Macri, al afirmar que «allá por el año 2015 un candidato a presidente les prometió que ningún trabajador iba a pagar el Impuesto a las Ganancias y sin embargo 4 años después el doble de los trabajadores pagaban el impuesto a las Ganancias».

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Con el anuncio Massa pudo mostrar el apoyo de la CGT y la CTA a su campaña tras haber alineado a los gobernadores

El anuncio del proyecto que enviará al Congreso no solo busca incomodar a sus rivales electorales sino que, además, le permite a Massa terminar de cerrar filas con la estructura del peronismo. Tras llevarse el fin de semana una fuerte señal de respaldo de los gobernadores que reconocieron que no vieron venir el «efecto Milei» en las PASO, ahora mostró el apoyo y el músculo político de la CGT y la CTA.

La otra pata de la estrategia para meter a la oposición en el barro económico

Con estos temas Massa obliga a la oposición a discutir sobre la economía actual y, sobre todo, futura, algo central para todos los candidatos donde siempre existe el riesgo de que alguno pise un cable pelado que le cueste votos en octubre.

Estos no son los únicos proyectos que forman parte de la estrategia del ministro-candidato. Esta semana tendrá que ingresar a la Cámara de Diputados el Presupuesto 2024 y, como complemento, Massa enviaría una «separata» para debatir el «gasto tributario», que son todas las exenciones de pago de diversos impuestos con las que hoy cuentan distintos sectores empresariales.

Massa sostiene que en esos fondos que el Estado deja de percibir vía impuestos está la llave para reducir el déficit sin un recorte violento en áreas más sensibles. Según explica, «4,9% del PBI son beneficios tributarios que tienen las empresas del gasto de Presupuesto, 1,8% son los programas sociales y 0,9% del PBI es todo el gasto del Poder Legislativo y del Poder Ejecutivo».

Ese «gasto tributario» es un tema complejo porque incluye beneficios impositivos muy diversos que van desde la exención del Impuesto a las Ganancias que gozan los funcionarios del Poder Judicial hasta los beneficios fiscales de las empresas radicadas en Tierra del Fuego.

La idea del candidato de Unión por la Patria al poner esto a debate en el Congreso es llevar a los diputados de la oposición a discutir cuáles de sos beneficios tributarios deberían eliminarse para achicar el déficit además del «gasto político» sobre el que machacan tanto Bullrich como Milei. Sería una forma de compartir el costo político de esos eventuales recortes.

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La Cámara de Diputados será la caja de resonancia sobre temas economícos clave en plena campaña

Qué plantea el proyecto sobre Ganancias que entrará al Congreso

Cuando Massa anunció días atrás que si es elegido presidente eliminaría el Impuesto a las Ganancias, Bullrich lo apuró: «¿Por qué no lo hace ahora, si es ministro de Economía?». El candidato oficialista aceptó el desafío y además de tomar el camino lógico del DNU para subir el mínimo no imponible busca cambiar la estructura del tributo con una nueva ley.

Luego de la reunión con la CGT, la CTA y autoridades de la Cámara de Diputados, el Ministerio de Economía confirmó que el nuevo mínimo no imponible será $1,7 millones de salario bruto desde octubre (15 salarios mínimo vital y móvil), por lo que dejarían de pagarlo los trabajadores en relación de dependencia y jubilados y solo estarían alcanzados los CEO’s, gerentes, puestos altos y jubilaciones de privilegio.

Esto se hará por decreto, pero Massa enviará al Congreso un proyecto para que la nueva estructura del impuesto quede fija en una ley para establecer la actualización automática semestral. La iniciativa señala que el nuevo mínimo no imponible de 15 salarios mínimos se ajuste en enero y julio de cada año.

El proyecto propone eliminar la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias para todos los trabajadores y jubilados y crea, además un régimen simplificado cedular dentro del Impuesto a las Ganancias denominado «Mayores Ingresos» que entraría en vigencia a partir de enero de 2024, en caso de que el Congreso apruebe la nueva ley.

Según las estimaciones del Ministerio de Economía esto abarcaría solo a 90 mil contribuyentes que representan el 0,88% del total de los empleos registrados.

Empleo Pyme: el otro debate que apura el oficialismo por pedido de Massa

La otra iniciativa que Massa envió a Diputados y que el bloque oficialista pretende acelerar a partir del próximo miércoles en la Comisión de Presupuesto y Hacienda es la denominada «Emplea Pyme» con la que apunta a dar un «alivio económico» para pequeñas y medianas empresas «que generen empleo» con una reducción de las contribuciones patronales.

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A la discusión sobre Ganancias se suma un proyecto sobre «empleo pyme» que Massa también intenta apurar

Entre sus puntos principales, el proyecto señala que se reducirán las contribuciones patronales para todas las relaciones laborales que se inicien a partir de la entrada en vigencia de la ley siempre que estas impliquen un aumento en la nómina del personal de cada empleador.

La reducción del 100% será para las pymes que contraten a jóvenes de entre 18 y 25 años que accedan al mercado laboral por primera vez y/o a beneficiarios de planes y programas sociales. Para este segundo caso, la iniciativa establece que por 12 meses el trabajador podrá mantener el plan social como complemento al salario y, además, deberá acceder a la obra social y la ART.

En el caso de que la pyme tome como empleado a una persona que no percibe ningún plan social, la reducción será del 50% para los primeros 12 meses de la relación laboral y otro 25% al año siguiente, según el proyecto.

Por otro lado, el proyecto también establece un esquema de regularización de situaciones laborales no registradas que hubieran iniciado con anterioridad a la ley en cuestión. La regularización deberá hacerse efectiva dentro de los 90 días corridos desde la entrada en vigencia de la norma.

La empresa podrá rectificar la remuneración o la fecha de inicio de la relación laboral y recibirá beneficios como quedar liberada de sanciones penales, y acceder a una condonación de deuda por capital, intereses y multas por los trabajadores que regularicen.

Con el objetivo de incrementar el trabajo formal, se propone «un esquema de protección y regularización de situaciones laborales precarias», para que las PyMEs regularicen relaciones laborales vigentes del sector privado iniciadas con anterioridad a la fecha en que se promulgue la ley.

Fuente: iprofesional.com

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