¿la IA espiará cuestiones privadas de empleados?
La tecnología llegó para solucionar problemas y mejorar muchos aspectos de la vida cotidiana, pero también deben considerarse cuestiones éticas y legales
Por Juan Diego Fosco – Médico Especialista en Salud Ocupacional
18/08/2023 – 16,05hs
Hace menos de un año, la empresa OpenAI lanzó ChatGPT, un chatbot que en muy poco tiempo se posicionó como el más utilizado y avanzado y popularizó la Inteligencia Artificial (IA) en todo el mundo. A partir de ese día, cada uno de nosotros comenzamos a preguntarnos: ¿Cómo ésta nueva herramienta impactará en nuestro trabajo? ¿Seré reemplazado por una computadora?
En materia de salud en el trabajo, la IA está siendo utilizada para analizar datos que permitan la detección temprana de enfermedades, localizar riesgos en los distintos puestos de trabajo y prevenir accidentes.
En los países desarrollados, la forma más avanzada de recopilación de datos médicos de cada persona es a través de wearables, accesorio «vestible» que además cumple funciones adicionales como por ejemplo relojes inteligentes, sensores portátiles y cámaras que monitorean en tiempo real determinados parámetros médicos como ser: frecuencia cardíaca, presión arterial, temperatura, cantidad y calidad de sueño, de ejercicio físico diario, etc.
Dichos datos, junto a evaluaciones médicas periódicas y exámenes complementarios, son analizados al instante por la IA para identificar patrones y ayudar al profesional de la salud a intervenir rápidamente y brindar un tratamiento personalizado y adecuado, minimizando contingencias. Es decir, permite actuar en los tres niveles de prevención (prevenir la enfermedad, detener su avance o atenuar sus consecuencias).
Es claro que para procesar datos y hacer comparativas con historiales clínicos, literatura médica, datos científicos actualizados para luego generar parámetros y sacar conclusiones valiosas, seguirán apareciendo en forma exponencial más y más tecnologías, pero mientras tanto es indispensable comprender que la IA es una herramienta, que se suma a otras, y que se complementan para que el médico tome las mejores decisiones posibles.
Inteligencia Artificial: la cuestíon ética y legal
Sin embargo, un aspecto que debe considerarse sin dudas es la cuestión ética y legal. La tecnología debe ser en extremo cuidadosa con la privacidad y seguridad de los datos de cada paciente. Supongamos que un empleado tiene problemas para conciliar el sueño, el servicio médico recibe la información y puede citarlo a consultorio para atender su problema y solucionarlo, así mejorará su calidad de vida y también la productividad de la empresa.
La IA puede traer beneficios para el ámbito de la salud, pero también implica un nuevo escenario desde lo ético y legal.
Ahora supongamos que otro empleado asiste a varias fiestas hasta altas horas de la noche y al otro día concurre a trabajar, ¿qué debe hacer el servicio médico? ¿Tener esa información es entrometerse en cuestiones privadas? ¿Hasta dónde podrían utilizarse los datos que otorga la IA y las nuevas tecnologías?
Los Estados y organismos tienen una gran oportunidad de generar políticas y regulaciones que definan nuevos estándares de buenas prácticas a partir de la información que se genera, coordinar ámbitos públicos y privados con fines colaborativos y constructivos, promover financiamiento que garantice la accesibilidad de la transformación digital a la mayor cantidad de personas posibles, prevenir sesgos algorítmicos y generar evidencia científica sobre la utilización de la IA en salud.
Dada la irrupción de la IA, nos encontramos frente a un desafío de proporciones todavía difíciles de ponderar, existe mucha ansiedad y expectativas sobre todo lo que podría llegar a lograrse, pero deberíamos saber que en esta nueva etapa se necesitará contar con capacitaciones constantes para desarrollar personal calificado que se sume para no dejar de ser protagonistas del cuidado de la salud de quienes trabajan y la seguridad de sus espacios laborales, pilares fundamentales de la comunidad.
