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¿Por qué la moto Royal Enfield se vende como pan caliente?

La fiebre por las motos Royal Enfield no se detiene. La marca que desembarcó en el 2018 al país, como parte integrante del grupo Simpa, logró algo que ninguna firma había logrado hasta entonces: ofrecer motos estéticamente atractivas, fiables, de buena reventa y precios contenidos.

Con un portfolio de siete diferentes modelos -Classic 350, Meteor 350, Hunter 350 (la última en desembarcar) Himalayan 411 (la más vendida de la marca), Scram 411 y las bi cilíndricas Interceptor y Continental 650-, Royal Enfield es la marca que más creció (50,4%) durante los primeros cinco de este mes, en comparación con el mismo período del 2022.

Una de las motos que causó furor desde su arribo fue la Royal Interceptor 650. Un modelo que ha sorprendido por sus buenas prestaciones y precio muy por debajo de sus rivales más próximas. En este caso, sale desde $3.730.000 a $3.900.000, mientras que la Triumph Trident 660 (u$s17.000) o la Ducati Scrambler Icon 800 (14.500 dólares).

Por ello, iProfesional realizó un test drive de algo más de 1.500 kilómetros con la Royal Enfield Interceptor 650, con el fin de vivenciar cuáles son los principales atributos de este modelo que se produce en el Parque Industrial Pilar (provincia de Buenos Aires).

Invasión de la moto Interceptor 650 en Argentina

La Royal Enfield Interceptor 650 no es novedad dentro de la marca. Se presentó en nuestro mercado a principios del 2019 y desde entonces sus ventas siempre fueron en alza.

Así por ejemplo, la moto lleva acumulada 715 unidades de enero a mayo de este año, lo que implica más del 50% de crecimiento en comparación al año anterior.

Las ventas de la Royal Enfield Interceptor crecieron 50% en 2023.

Una muestra palpable de esta «invasión de Interceptor», queda plasmado en cada encuentro de moto, como por ejemplo, la última edición del Distinguished Gentleman’s Ride (DGR).

El masivo evento global que se lleva a cabo en las principales ciudades del mundo, con el fin de recaudar fondos para enfrentar el cáncer de próstata y la salud mental, reunió más de tres mil motoristas en Buenos Aires, donde el comentario que prevaleció fue: «qué cantidad de Interceptor hay».

Su diseño «vintage», el gran señuelo de la moto

Son muchos los factores que inclinan la balanza a favor de esta «Royal» y el primero que hay que mencionar es su estética, la cual combina a la perfección el estilo clásico de las motos de época, con soluciones de avanzada.

A la vista, la Interceptor 650 parece haber llegado de la década de 60 sin escalas a los tiempos actuales. Reúne detalles como, el faro redondo con guiños en sus costados y un tanque de nafta (13,2 litros de capacidad) en forma de lágrima.

La Interceptor, con diseño vintage, se volvió la más exitosa de la marca.

La Interceptor, con diseño vintage, se volvió la más exitosa de la marca.

La instrumentación también es clásica, conformada con doble reloj analógico, con un pequeño display que muestra a través de una barra, la disponibilidad de combustible y los indicadores totales y parciales de kilómetros recorridos.

El asiento es de una sola pieza para dos pasajeros y se encuentra forrado en cuerina de buena calidad, con costuras en forma de rombo. El caño de escape en cromo, con doble salida en ambos laterales, es otra reminiscencia al pasado.

El faro redondo le da a la moto un estilo propio.

El faro redondo le da a la moto un estilo propio.

Un gran acierto de la marca -siguiendo con la estética- que aplica no solo a la Interceptor, sino a todos los modelos, es el amplio abanico de colores y accesorios, los cuales se venden por separado para personalizara aún más.

Una moto con buen empuje y confortable 

La Royal Enfield Interceptor y su variante de estilo más Café Racer, la Continental GT, son los únicos modelosque de momento se ofrecen con motor bi cilíndrico en paralelo; el resto de la gama recurre a motores mono cilíndricos de menor potencia y reacción.

Se trata de un propulsor de 648 cc refrigerado por aire y aceite, con una potencia más que suficiente (47 CV con un par motor de 52 Nm de torque) para impulsar a sus 218 kilos de peso. Es un moderno propulsor que se encuentra alimentado por inyección electrónica, el cual se asocia a una caja de seis marchas.

Con 650cc y 47cv, se comporta muy bien en todos los escenarios.

Con 650cc y 47cv, se comporta muy bien en todos los escenarios.

En lo concerniente a la parte ciclo, Royal Enfield optó por un chasis doble cuna con estructura tubular de acero. En el equipo de suspensiones, cuenta con una horquilla convencional con barras de 41 mm y un recorrido de 110 mm. En tanto que, en sector trasero disponen de dos amortiguadores con regulación en precarga.

En la práctica, lo que la marca priorizó con este conjunto de suspensiones, fue la comodidad de marcha, la cual es un tanto más suaves que la Continental GT, sin descuidar el aplomo y la respuesta que se puede esperar de este conjunto.

El sistema de frenado dispone de ABS de la firma Bosch y discos en ambos ejes de la firma ByBre, segunda marca de Brembo. Vale destacar las llantas negras de 18″, altas y estrechas, con un neumático delantero de 100 / 90-18 y de 130 / 70-18 detrás.

¿Cómo se comporta la moto Royal Enfield Interceptor?

Comenzando por la postura de manejo, la característica de esta moto es de la «vieja escuela». Con el manillar elevado, la posición de la pedalera y el asiento bien recto, adopta una posición más bien erguida.

Por el contrario, para los que les gusta una postura más inclinada y aerodinámica, la Continental GT 650 es la indicada, con el manillar más bajo y las estriberas más atrasadas. Eso sí, es una postura un poco menos relajada.

La posición de manejo es una de las virtudes de la Royal Enfield Interceptor 650.

La posición de manejo es una de las virtudes de la Royal Enfield Interceptor 650.

Entre la cantidad de accesorios que se le puede agregar o piezas que se suelen reemplazar, el asiento está en el top ten. Si bien el original está muy bien resuelto, su dureza pasar factura a medida que uno transcurre más horas arriba de la moto.

Para realizar maniobras en parado, como por ejemplo, retroceder para salir de un lugar estrecho, suele ser una moto pesada y con poco radio de giro. Por lo contrario, cuando se encuentra en marcha, se vuelve una moto dócil y maniobrable.

Una moto «retro», pero de avanzada

Cuando se menciona que la Royal Enfield Interceptor es una moto de estilo vintage, pero moderna, en la práctica eso significa que no emite ruidos provenientes del motor y que no transmite vibraciones.

Es muy placentero moverse por la ciudad con esta moto, con marchas que se pueden ir pasando de manera imperceptible; ayudado en gran parte por el embrague con la función anti rebote, de un accionamiento totalmente suave.

El asiento para dos personas es un atributo cómodo de la Royal Enfield Interceptor.

El asiento para dos personas es un atributo cómodo de la Royal Enfield Interceptor.

El sonido que emite su motor a través de sus escapes, es muy agradable. Es un ronroneo discreto, pero que deja un gusto a poco, considerando que se trata de un motor twin. Por ello, la mayoría de los usuarios opta por reemplazar ambos silenciadores, por otros que se expresen con mayor carácter.

¿Sirve para viajar en ruta la moto Royal Enfield Interceptor?

Fueron muchos los kilómetros de esta prueba que recorrimos por caminos abiertos y en este contexto, queda claro que no es la moto ideal para estos trayectos, principalmente por la ausencia de cualquier tipo de protección contra el viento.

Las terminaciones de la Interceptor tienen atributos del pasado.

Las terminaciones de la Interceptor tienen atributos del pasado.

Sin embargo, se defiende bastante bien en ese escenario: tiene buena potencia, reacciones vivaces para los sobre pasos y su autonomía se acerca a los 250 kilómetros, con un consumo que ronda los 5 litros cada 100 km, viajando a unos 110 km/h.

La moto que hoy es un negocio redondo

La Royal Enfield es una moto divertida y fácil de conducir. Sus 47 CV sobran para moverse en ciudad y son más que suficientes para salir a rutas o autopistas. Se le puede reclamar algunos faltantes como más información en su instrumental mayor protección contra el viento o mejor iluminación de su faro principal; sin embargo cualquier adicional incidiría en su atractivo precio y ello, hace bajar las pretensiones de cualquier motorista racional.

La Interceptor es una moto cargada de estilo y con prestaciones excepcionales, que se conjugan con un precio final que además de ser tentador, la marca ofrece la posibilidad de financiar hasta el 50% de su valor, en cuotas fijas y en peso.

Sin dudas, un combo imbatible que explica el fenómeno de ventas de este modelo, el cual tienta incluso a los no amantes de las motos y que terminan viendo en ella, un negocio redondo por donde se lo mire.

Fuente: iprofesional.com

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