Bullrich y Larreta tensiona una interna que seguirá hasta las PASO
Los poco más de cuarenta días que faltan hasta las PASO no transcurrirán en paz entre los precandidatos de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta, quienes protagonizaron una semana cargada de cruces y réplicas muy duras.
La primera semana tras la oficialización de las listas electorales mostró una carrera entre ambos postulantes por diferenciarse, y esa diferencia la buscaron en el ataque al oponente.
Larreta generó la furia del sector de Bullrich al apuntar contra la gestión de Mauricio Macri al frente de la Casa Rosada, al decir que había «fracasado», lo que le valió una fuerte respuesta de la exministra de Seguridad, que lo trató de «ventajero» y «oportunista».
Tras el revuelo, Larreta moderó sus palabras y explicó que cuando habló de fracaso aludía al «modelo de peleas y antinomias».
«Lo que no se pudo, en ese momento -dijo al aludir al Gobierno de Macri- fue construir un apoyo suficiente para mantener ese cambio en el tiempo. Hoy tenemos más apoyos, pero no alcanza».
Más allá de las chicanas, el intercambio revela dos estrategias de campaña distintas: Bullrich será la continuadora de la línea ‘dura’ de Macri, con políticas de ‘shock’ en lo económico y también un perfil intransigente en materia de combate a la inseguridad.
Larreta, en tanto, quiere hablarle al electorado que no es kirchnerista, que está en el centro del espectro político y que puede haberlo votado a Macri en el pasado pero que considera que durante esa gestión hubo varios errores.
Durante la semana, los dos búnkeres, el de Larreta y el de Bullrich, tuvieron una noticia buena y una mala en términos políticos: la mala fue la designación del ministro de Economía Sergio Massa como candidato del oficialismo.
En medio de tantas diferencias, los estrategas de campaña de Larreta y de Bullrich coinciden en que el ministro del Interior, Eduardo ‘Wado’ de Pedro era un postulante menos competitivo que su par de Economía, quien finalmente fue el elegido por Unión por la Patria.
Pero la buena noticia vino de la mano de las encuestas, aún incipientes, que comenzarían a mostrar un declive en la intención de voto del representante de La Libertad Avanza, el economista Javier Milei, quien ya no se ubicaría protagonizando el tan mentado escenario de tercios que se planteó en el primer trimestre del año.
Según esa visión, Milei, el kirchnerismo y Juntos por el Cambio se encaminaban a la elección desde un punto de partida donde cada sector tendría un tercio del electorado.
A la luz de más recientes sondeos, el escenario se parecería ahora más a una polarización entre el peronismo y JxC, con Milei cosechando una buena cantidad de votos pero ya sin chances de acercarse a ese escenario de tercios.
Como siempre, en medio de las internas entre Bullrich y Larreta suele colarse la figura del expresidente Macri, y esta semana no fue la excepción.
Macri apareció en Santa Fe para respaldar a la candidata a la gobernación del sector de Bullrich, Carolina Losada.
En tanto, Larreta respalda en tierras santafesinas la postulación de Maximiliano Pullaro, enfrentado con Losada en un nivel de intensidad de no retorno, considerando que la radical lo vinculó al narcotráfico.
Macri sigue sin expresarse públicamente a favor de Bullrich, pero los gestos hablan por sí solos.
La interna también tuvo su capítulo porteño, con el lanzamiento formal como precandidato a jefe de Gobierno porteño del senador radical Martín Lousteau, que incluyó el envío de un saludo de parte de Larreta.
Larreta, en territorio porteño, donde se juega su sucesión, tiene una situación incómoda, porque si bien el candidato de unidad del PRO es Jorge Macri, el alcalde hizo varios gestos favorables a Lousteau.
Más allá de la pirotecnia verbal con Bullrich, Larreta también aprovechó la semana para comenzar a instalar los temas de campaña, que -según anunció- irá desgranando por ejes de gestión, con una frecuencia de dos veces por semana, acompañado con su compañero de fórmula, el gobernador jujeño Gerardo Morales.
Larreta intentará darle una impronta federal a su campaña e irá hilvanando mensajes desde distintos puntos del país: esta semana, para lanzar su propuesta en materia laboral, el lugar elegido fue Corrientes, tierra gobernada por el radical Gustavo Valdés.