‘El día que Madryn se quedó sin pan’
Tal como es habitual desde hace años, en Puerto Madryn se recordó un nuevo aniversario de “El Día que Madryn se quedó sin pan”, en el que se rememora el día en el que más de 4.000 soldados desembarcaron en nuestra ciudad, volviendo a casa luego de la Guerra de Malvinas. Concretamente, hace 41 años volvieron a bordo del buque Canberra, al que le siguieron las llegadas en los buques Northland, ARA Almirante Irizar y Saint Edmund.
El acto, que se llevó a cabo en el Ecocentro Pampa Azul, estuvo encabezado por el intendente Gustavo Sastre, acompañado por el veterano de guerra y director del Museo Malvinas e Islas del Atlántico Sur, Edgardo Esteban; la viceintendenta Noelia Corvalán y veteranos de Guerra de Malvinas que vinieron desde Buenos Aires, Río Negro, Córdoba, Neuquén, Santa Fe, Catamarca, La Pampa, Chaco, Corrientes, Mendoza, Santa Cruz, Tierra del Fuego y de distintas localidades de Chubut, sumando también a los representantes de Puerto Madryn.
“Esta fecha es muy importante para todo el país, pero en Puerto Madryn tiene un sentimiento especial. Para nosotros no es un día más, es un día histórico. Quiero decirles a los veteranos que para nosotros los madrynenses es de suma relevancia que puedan estar acá presentes”. dijo el intendente Sastre.
En este mismo sentido, agregó que “hace mucho tiempo que hemos tomado la decisión de seguir malvinizando fuertemente a nuestra ciudad e invito al resto de las ciudades del país a que hagan lo mismo, ya que Malvinas no es una causa más, es un sentimiento marcado a fuego para cada uno de los habitantes de la República Argentina. Deseo fuertemente como argentino que en muy poco tiempo las Islas Malvinas vuelvan a tener flameando nuestra bandera celeste y blanca, deseo que seguramente tenemos muchos. Esto debemos lograrlo con la madurez necesaria que tienen que tener los Estados para mediar y poder recuperar lo que nunca debimos haber perdido”.
Por último y en un mensaje dirigido a los veteranos, sostuvo que “en cada pedazo de pan que les dieron los madrynenses aquel día, les entregaron parte de su corazón y también una parte de Puerto Madryn. Gracias por estar aquí y nuestra ciudad siempre va a ser su casa”.
Por su parte, el director del Museo Malvinas e Islas del Atlántico Sur, Edgardo Esteban, remarcó: “Estoy muy emocionado por lo que estamos viviendo y por los recuerdos que todo esto me trae. Cuando bajamos aquel 19 de junio del Canberra, esta ciudad era mucho más chiquita y recuerdo a la gente que nos esperó para darnos un pedazo de pan y un abrazo. Volvimos con la sensación de haber dejado un pedazo de nuestro corazón en las Islas y va a ser así hasta que volvamos a ver flamear a nuestra bandera celeste y blanca en este territorio, en un futuro no muy lejano”.
“Esta iniciativa de ‘Pisar Malvinas’ la pensamos con el objetivo de transmitir este profundo amor y compromiso malvinero a las generaciones venideras. Cuando uno dice ‘Malvinas’ es uno de los pocos temas que se rescata desde lo colectivo. El 2 de abril no hay ninguna ciudad del país que no homenajee a nuestros caídos. Quizás en aquellos días se nos ocultó, menos en Madryn. Pueden pasar cinco años, diez años, cien años, pero no vamos a claudicar porque tenemos todos el mismo sueño, volver a Malvinas y que flamee nuestra celeste y blanca como corresponde. Las Malvinas fueron, son y serán por siempre Argentinas”, concluyó Esteban.
En primer lugar, se entonaron las estrofas del Himno Nacional Argentino, que fueron acompañadas en el piano por Sergio Ariel Vainroj, un veterano de guerra que cuando regresaba como prisionero en el buque inglés Canberra, junto a otros 300 soldados, visualizó un piano en el espacio en el que se encontraban.
Sergio se acercó y comenzó a tocar distintas canciones, hasta que, a pedido de sus compañeros, entonó las estrofas del Himno Nacional Argentino a bordo del buque inglés. Inmediatamente, todos y cada uno de los soldados argentinos se pusieron de pie y cantaron nuestra canción patria a viva voz.
Ante esta situación, un soldado inglés interpretó el hecho como un amotinamiento, se acercó a Sergio, lo apartó del piano y lo golpeó fuertemente. El himno quedó inconcluso, pero sus acordes ya habían sonado en un barco inglés.
Cabe recordar que a través de la Ordenanza N°9449, todos los 19 de junio se reconocen como “El Día que Madryn se quedó sin pan”, recordando que en 1982 la sociedad de nuestra ciudad salió a las calles a recibir a los soldados, rompiendo el cerco de seguridad interpuesto por los militares.
Los vecinos corrían hacia los camiones cargados de soldados con el solo propósito de alcanzarles algo para que puedan comer. Las pocas panaderías de aquel entonces no dieron a basto con sus producciones y, ese día, literalmente, Puerto Madryn se quedó sin pan, pero logró estrechar con un enorme abrazo a quienes dieron todo por nuestra patria.
En el acto de este lunes, se descubrió una nueva maqueta realizada por el artista madrynense Santiago Pereyra y vinculada a la Guerra de Malvinas, que en este caso fue del buque Northland.
Posteriormente, se inauguró la muestra “Pisar Malvinas”, una experiencia sensorial inmersiva, en la que, a través de realidad virtual se puede “recorrer” las Islas Malvinas, observando su paisaje, su geografía y su fauna. Esta experiencia fue desarrollada por la Universidad Nacional de San Martín, en el marco del concurso “Activar patrimonio”, del Ministerio de Cultura de la Nación. En este marco, se firmó un convenio de cogestión entre el Ecocentro Pampa Azul y el Museo Malvinas e Islas del Atlántico Sur.
En el acto, también estuvieron presentes el secretario de Gobierno, Martín Ebene; el presidente del Consejo de Administración del Ecocentro Pampa Azul, Diego González; el secretario de Ciencia, Tecnología, Innovación Productiva y Cultura de Chubut y representante titular de la Provincia ante el Consejo Directivo del Ecocentro Pampa Azul, Mauro Carrasco; el coordinador ejecutivo del Comité Interministerial de la Iniciativa Pampa Azul y representante titular del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación ante el Consejo Directivo del Ecocentro Pampa Azul, Juan Emilio Sala; el Gabinete Municipal; diputados provinciales; concejales y público en general.