El juez federal Marcelo Martínez de Giorgi ordenó un entrecruzamiento de llamados entre los exjefes de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) durante el macrismo, Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, y dos exempleados jerárquicos de ese organismo, pero también identificar quiénes eran los contactos con los que mantenían comunicaciones frecuentes, informaron fuentes judiciales.
Se trata de una medida que había solicitado el fiscal Franco Picardi en la causa en la que se investiga el espionaje al Instituto Patria y a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner en 2018 y que en realidad era más amplia: incluía el análisis de comunicaciones de otras personas de interés para la investigación.
El fiscal lo había solicitado cuando reclamó el envío a juicio oral del tramo central de la causa, a la vez que había requerido que se profundizara la investigación en aras de determinar si el expresidente Mauricio Macri había estado en contacto con los jefes de la AFI en los momentos en los que, según la investigación judicial, se desplegaron las supuestas maniobras de espionaje ilegal sobre la sede del Instituto Patria y en el entonces domicilio de la vicepresidenta.
Al disponer la medida, el juez Martínez de Giorgi sostuvo que «la diligencia descripta se impone como vía de conocimiento posible para reconstruir interacciones y determinar o descartar la intervención en el hecho de superiores jerárquicos de las personas implicadas hasta el momento», según surge de la resolución a la que accedió Télam.
El magistrado requirió a la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado (DAJuDeCO) la realización de «un análisis técnico de su especialidad», tendiente a determinar «las comunicaciones verificadas entre los titulares y/o usuarios de las líneas de interés», el detalle de «interlocutores frecuentes, con la debida indicación de fechas y períodos de comunicaciones, de cada una de las líneas señaladas» y sus respectivas geolocalizaciones.
Para los investigadores, el supuesto espionaje a la sede política del kirchnerismo y al domicilio de Fernández de Kirchner -además de otros casos que se investigan de forma paralela, como los seguimientos a periodistas o el espionaje a la hermana de Macri- son elementos que demostrarían que lo que estaba en juego excedía el interés particular de Arribas o Majdalani.
Fuentes judiciales señalaron que esperan que la medida arroje, por ejemplo, información que permita determinar si los entonces jefes de la AFI reportaban a alguien más, como podría ser el propio expresidente.
El análisis de comunicaciones dispuesto en esta oportunidad incluye las llamadas de Arribas, Majdalani, el exdirector de Operaciones Especiales de la AFI Alan Ruíz y el exdirector del área de Asuntos Jurídicos del organismo de inteligencia, Juan Sebastián De Stéfano: los tres primeros están procesados y con pedido de elevación a juicio por parte de la fiscalía.