El papa Francisco aseguró este miércoles que «no se debe nunca asesinar en nombre de Dios» y recordó a los mártires de la Iglesia y pidió que sean «semillas de paz y de reconciliación».
«Nos conmueve ver cómo el testimonio de sangre puede unir personas de religiones diferentes. No se debe nunca asesinar en nombre de Dios, porque para Él somos todos hermanos y hermanas», dijo el pontífice al encabezar la Audiencia General semanal en la Plaza San Pedro.
En varias oportunidades, Francisco ha rechazado la instrumentalización de las religiones para la violencia y llegó a asegurar que «matar en nombre de Dios es satánico». Para el Papa, en cambio, «juntos se puede dar la vida por los otros».
Que «todos los santos y las santas mártires sean semillas de paz y de reconciliación entre los pueblos por un mundo más humano y fraterno», llamó Jorge Bergoglio, tras recordar a las personas que murieron al «dar la vida» por la Iglesia a lo largo de los años.
«Los mártires, imitando a Jesús y con su gracia, convierten la violencia de quien rechaza el anuncio en una ocasión suprema de amor, que llega hasta el perdón de los propios verdugos», agregó luego.
