‘Trabajamos en las elecciones en un escenario de vuelta a la normalidad’
La vuelta a la normalidad en el contexto político social de la pospandemia trajo aparejado muchos desafíos y enseñanzas, que sin duda marcan este año en el que se realizan elecciones presidenciales, las que tendrán un perfil más parecido a las del 2019 que a las del 2021, destacó el titular de la Dirección Nacional Electoral (DINE), Marcos Schiavi.
En una entrevista con Télam, el funcionario comentó que «estamos trabajando claramente con una hipótesis de que no vamos a votar en la situación Covid como lo hicimos en el 2021«, que «obligó a muchos cambios porque teníamos un nivel de incertidumbre importante vinculado a la propia pandemia», por lo que «estimamos las elecciones del 2023 tendrán un perfil más parecido a las del 2019».
La última palabra sobre el cronograma electoral la tiene la Cámara Nacional Electoral (CNE), que ejerce esa competencia al ser la autoridad máxima en estas cuestiones pero que aún no definió oficialmente el calendario, aunque sin embargo hay fechas para concretar el proceso que ya están previstas en la ley, precisó el funcionario.
Algunas de las provincias tienen prohibido en su Constitución que las elecciones sean simultáneas con las nacionales; otras, por ley; algunas, tienen boleta única o electrónica, lo cual hace difícil hacerlas coincidir con la boleta nacional, y en otras lo deciden las fuerzas políticas locales
Schiavi sostuvo que el ministro del Interior, Eduardo de Pedro, «nos remarcó la necesidad de profundizar la transparencia del proceso, generar certeza y seguridad en la población«, y «de reforzar un sistema electoral ya de por sí muy robusto y muy confiable para la población, y con esos lineamientos trabajamos».
El padrón provisorio de electores ya está en consulta a través de las diferentes páginas y sitios de Internet de los organismos oficiales y a fines de abril próximo la CNE dará a conocer el listado definitivo, lo cual representa un hito «fuerte» para el comienzo del proceso ya que implica conocer el número final y quiénes están habilitados para votar.
«La convocatoria a elecciones, que esa sí la hace el Poder Ejecutivo, tiene fecha límite para mediados de mayo y ahí ya se va desplegando un proceso electoral que tiene parámetros fijados por leyes: las PASO según la normativa serán el segundo domingo de agosto, que es el 13 de agosto, y ahí no hay muchas vueltas que darle», señaló Schiavi.
En ese punto, el funcionario ratificó que «no hay dando vueltas ningún proceso, o propuesta de proyecto de ley, o propuesta de ley ingresado» para suspender o eliminar las PASO a nivel nacional, «y además nosotros desde el Poder Ejecutivo no podemos hacer mucho más que seguir lo que fija en ese sentido el Poder Legislativo, que es el que tiene la facultad constitucional de decidir en materia electoral».
Previamente a las PASO, están los tiempos que tienen que ver con cierre de alianzas y cierre de listas que son en junio: serían el 14 y el 24 de ese mes, respectivamente. Las elecciones presidenciales generales se realizarían el domingo 22 de octubre, y el balotaje o segunda vuelta, en caso de ser necesario, se concretaría el domingo 19 de noviembre.
Pero el calendario electoral de la Nación no coincide con las fechas de los comicios de varias de las provincias, que este año decidieron desdoblarlo del general. Así, adelantarán sus elecciones: Neuquén, Río Negro, Jujuy, Misiones, La Rioja, La Pampa, Salta, Tucumán, San Juan, Tierra del Fuego, San Luis, Mendoza y Chaco.
En tanto, Córdoba aún no determinó fecha, mientras que Entre Ríos tiene fecha decidida: 24 de septiembre, pero aún no dio a conocer el decreto de convocatoria, y evalúan hacerla junto con la Nación las provincias de Buenos Aires, Catamarca, Chubut y la Ciudad de Buenos Aires.
No tienen aún decidida la fecha de sus elecciones locales Santa Cruz, Corrientes, Formosa y Santa Fe.
En 2005 hubo 12 provincias que se sumaron a la elección nacional y, desde esa fecha, el número fue variando, con el mínimo registrado en 2019, cuando fueron sólo cuatro los distritos del interior que se plegaron a los comicios generales.
«Pero esos comicios no dependen de nosotros», precisó Schiavi, y señaló que las provincias son autónomas, se dan su organización y deciden sus propios procesos electorales en forma independiente.
Algunas de las provincias tienen prohibido en su Constitución que las elecciones sean simultáneas con las nacionales; otras, por ley; algunas, tienen boleta única o electrónica, lo cual hace difícil hacerlas coincidir con la boleta nacional, y en otras lo deciden las fuerzas políticas locales.
El titular de la DINE expresó que «estamos trabajando bajo una situación que presuponemos alejada de las dificultades que nos causó en el 2021, y esto implica ir ya cerrando los procesos administrativos correspondientes que nos permitan en el corto plazo empezar a hacernos de las urnas y sobres que necesitamos para la elección, los materiales correspondientes, material de seguridad, útiles».
En el marco de un presupuesto de 55.000 millones de pesos que se estima demandarán las elecciones, que fue aprobado por el Congreso Nacional, la DINE ya firmó convenios con la Casa de la Moneda para la impresión de los padrones y con la imprenta del Congreso de la Nación para la impresión de los materiales gráficos, dijo el funcionario.
«Con el Correo Argentino estamos cerrando los últimos detalles para el servicio de logística y de transmisión, y después estamos muy cerca de cerrar las licitaciones, en un plazo de dos o tres semanas, vinculadas a las compras y contrataciones para el proceso eleccionario», agregó.
Para cada elección «tenemos que disponer de aproximadamente unas 110.000 urnas y 40 millones de sobres más todos los materiales adicionales, que distribuimos en los juzgados y éstos a su vez los envían a los lugares de votación vía el Correo Argentino «, explicó.
Schiavi señaló que además dentro del presupuesto asignado se debe contabilizar «un refuerzo para el Poder Judicial en materia de recursos humanos, o sea, de contrataciones y horas extras, y a eso se suma el comando electoral, que es la seguridad que brindan las Fuerzas Armadas y las fuerzas federales el día de la elección».
