La orquesta Sciammarella Tango llega a La Cigale para celebrar la Fiesta de La Bastilla
Sciammarella Tango, orquesta femenina que el año próximo cumplirá 10 años de trayectoria, se presentará este jueves a las 20 en La Cigale, donde tocará en el marco de La Fiesta de la Bastilla, una celebración que apunta a hermanar las culturas de Argentina y Francia con una propuesta de música urbana.
Tangos en francés, platos típicos franceses y los aperitivos más famosos de la tierra gala, promete el encuentro presentado como “el día más francés del año” y que se realizará en el local porteño ubicado en 25 de Mayo 597.
La cantante Denise Sciammarella es la creadora y cantante de la agrupación que se caracteriza por conjugar música e investigación y que está integrada por instrumentistas de diferentes nacionalidades: Cindy Harcha (dirección musical, bandoneón y arreglos), Hanel Yeon (piano y bandoneón), Shino Ohnaga (piano), Mariana Atamás y Cecilia Florencia García (violín) y Marisa Hurtado (contrabajo)
A lo largo de recorrido la orquesta recuperó obras el tango “Lutecia (Parisien)”, de Héctor Stamponi y Virgilio Expósito, «Un argentin à Paris», del pianista Héctor Grané, apodado «el francesito», o la versión francesa del tango «El Choclo», cuya letra compuso en 1912.
Con un videoclip filmado a la vera de la Catedral de Notre Dame, la orquesta le devuelve la vida al tango «Luces de París», de Cátulo Castillo, Enrique Cadícamo y Carlos de la Púa, que fue parte de «Galerías de Esperanzas», una de las tantas películas del cine nacional que se perdieron para siempre.
A los pies de la estatua de Carlos Gardel que se encuentra anclada en el Depósito de Obras de Arte de la Ciudad de París, en la localidad suburbana de Ivry-sur-Seine, la orquesta le rinde un homenaje al “Zorzal Criollo”, peleando por el emplazamiento público de la obra.
Los aportes de Sciammarella Tango incluyen, además, canciones propias como el tango “Esperando el 24”, inspirado en los versos del poeta, historiador y escritor parisino Alphonse de Lamartine, o la milonga «Comme il faut pas», que reflexiona, en francés, sobre cómo debe ser el amor.
