‘Las Malvinas son argentinas, los desaparecidos también’
La organización Abuelas de Plaza de Mayo recordó el relato de Delia Giovanola, una de sus 12 fundadoras, sobre la emblemática foto que confeccionó en medio del conflicto bélico para visibilizar el reclamo por los desaparecidos argentinos, con el cartel: «Las Malvinas son argentinas, los desaparecidos también».
La foto, que hoy se encuentra en el Museo Malvinas en el Espacio Memoria, la convirtió en «La Abuela de las Malvinas».
«Esa foto es de 1982, en pleno conflicto con las Malvinas. A Plaza de Mayo venía cualquier cantidad de periodistas extranjeros. Por supuesto, no venían abiertamente a sacarnos fotos a las Madres de Plaza de Mayo, pero aprovechaban la circunstancia sin llamar la atención”, contó Giovanola, según recuerda hoy Abuelas en un comunicado.
Y continuó: “Entonces, la ciudad de Buenos Aires estaba totalmente empapelada con calcomanías que decían ‘Las Malvinas son argentinas’, y otra que decía ‘Los Argentinos somos derechos y humanos’. Los postes de luz, las paredes, los lugares donde entrara una calcomanía, en los colectivos, en los micros, en los autos, en los vidrios de los autos pegados: ‘Las Malvinas son argentinas’ y ‘los argentinos somos derechos y humanos’”.
🇦🇷A 40 años. de Malvinas nuestro recuerdo y homenaje a los soldados y el repudio a la Dictadura genocida. 🗣La Abuela Delia Giovanola cuenta cómo decidió hacer ese cartel: «Las Malvinas son argentinas, los desaparecidos también». https://t.co/rZLUWqgzaV pic.twitter.com/WQPAQ8Kqsh
— Abuelas Plaza Mayo (@abuelasdifusion) April 2, 2022
“Fue tanta la indignación de ver la ciudad empapelada y que nadie hablara de las Madres y Abuelas que estábamos ahí hacía seis años ¡Porque hacía seis años que estábamos dando vueltas a la Plaza y no nos veían! que llegué a mi casa y busqué algo, una bandeja de masas caceras, era un cartón grande, y escribí, con bronca: Las Malvinas son argentinas, los desaparecidos también”, relató.
En esa línea, continuó: “Y bueno, al jueves siguiente agarré el cartel, fui bien temprano, cosa que estuviera despejada la Plaza y me puse el cartel en el pecho. Con cara de santa empecé a hacer la ronda, y los periodistas vinieron como las moscas a la miel, fotógrafos de distintos lugares del mundo me sacaron fotos».
«Pero eso no trascendió, yo veía que me sacaban fotos, pero no trascendió, recién en 2010, en Facebook me encontré con la foto, y luego con la inauguración del Museo de Malvinas, cuando vine en representación de Abuelas a la inauguración, me encontré con la gigantografía y me convertí en la Abuela de las Malvinas”, agregó. »