Rafael Sendra cumplió el objetivo de llegar a Viedma y abrazar a su papá de 92 años
Serafín y Rafael Sendra terminaron este viernes la Etapa 8 en la 18va colocación de la general, lo que lo catapultó a la 6ta posición en su categoría T3.2. A su ingreso al Autódromo Ciudad de Viedma, ubicación del vivac del SARR 2022, los Sendra recibieron una sorpresa muy especial: hermanas y padre del navegante.
Una bandera que decía “Sera y Rafa Sendra, nuestros campeones” y aparecía colgada en uno de los accesos a la zona donde se encuentran los Patagónicos, que de alguna manera “juegan” de locales.
“Fue un recibimiento emotivo, donde llegó mi padre, hijo mayor, mi hermana de Comodoro, sumada a la que vive en Viedma y mi cuñado. Esperaba llegar y darme esos abrazos, porque nos queda un día con toda la familia y mañana si Dios quiere vamos a estar todos en la rampa”, aseguró el navegante del UTV 252.
Sendra recordó a su madre, Nélida que falleció el año pasado, días después que fue subcampeón del SARR 2021 y se emocionó a ver el momento que le toca vivir con su gente y su papá Jorge Rafael.
“Cuando entré al autódromo se me cruzo el cartel, junto con el que me hicieron en Comodoro con mamá y ahora con papá”, se emocionó completamente.
Una etapa 8 con trepada en las posiciones y la esperanza para la final
“Por ahora el auto está entero y Serafín lo lleva muy bien, lo cuida y dentro de las carreras estamos mirando y prestando mucha atención, pero son fierros y todo puede pasar”, reconoció el comodorense.
Sendra, que comparte el auto junto a su hijo Serafín, ya palpita la 9na y última etapa del South American Rally Race y dijo que “sino se seca el piso sobre el que va a pasar la carrera será corta”.
Aunque respecto al 7mo tramo, el que le permitió alcanzar la sexta colocación y la 18va en la general, el experimentado navegador de 53 años reconoce que “hay muchos autos que quedaron relegados y encajados”.
“Veníamos de cambiar el filtro, tras la etapa maratón –donde solo nosotros podemos tocar el UTV- cambiamos el filtro por el barrial que transitamos en la etapa 7. Acomodamos el auto y salimos para Viedma, por lo que el especial se anuló y la segunda especial fue por las dunas rápidas por los terrenos que habían”, remarcó.
En su descripción, “Rafa” indicó que fueron 30 km con mucha duna y con características raras con un dibujo como cenicero de 5 metros y separadas por poca distancia, en pozos de 3 o 4 metros. “Largamos y nos metimos, pero encontramos 5 o 6 autos entre camionetas y UTV, que en algunos casos contaban con cubiertas rotas, algo que el sistema de navegación nos iba informando, pero luego pasamos a la playa y ya nos sentíamos bien porque manejamos en pedregullo”, describió al momento de contar cómo fue la etapa que los dejó en Viedma.