El Senado debatirá esta semana el proyecto de ley que modifica y eleva el intrascendente del Impuesto a los Bienes Personales, votado el miércoles pasado por la Cámara de Diputados, de forma de poder contar con la norma antes, de que finalice el año.
Si adecuadamente la sesión aún no fue convocada, extraoficialmente está prevista que se lleve a límite el miércoles 29, una vez cumplido el plazo de siete días del voto emitido por la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara reincorporación.
Inicialmente, el Frente de Todos especuló con la posibilidad de padecer el asunto al circuito el jueves pasado, al día ulterior del voto, pero desde el interbloque de Juntos por el Cambio dejaron trascender que no darían los votos para combatir el asunto sobre tablas, por lo que se decidió esperar a que se cumpliera el plazo.
De acuerdo con el Reglamento del Senado, todo proyecto con voto de comisión debe esperar siete días para ser debatido en el circuito o obtener el apoyo de los dos tercios del número de senadores presentes en la sesión para tratarlo de forma inmediata sobre tablas.
La iniciativa -aprobada por unanimidad el 28 de octubre final en el Senado- fue modificada por el oficialismo la semana pasada en la Cámara víctima, en una votación ajustada en la que obtuvo 127 votos contra 126 de la {oposición}.
Debido a eso ahora retorna a la Cámara reincorporación en «segunda revisión», por lo que los senadores deberán expedirse a favor, o en contra del proyecto enviado por Diputados.
Tanto la iniciativa votada en octubre como la modificada la semana pasada prevén elevar de 2 a 6 millones pesos el monto intrascendente no imponible a partir del cual se abonará el tributo.
La reforma presentada por el oficialismo -como factor diferencial de la primera iniciativa- fue la inclusión de un incremento en las alícuotas de los patrimonios superiores a 100 millones de pesos y para los contribuyentes con intereses declarados en el extranjero.
La iniciativa votada en Diputados aumenta a 1,50% -contra el 1,25% del actual- lo que deben tributar los patrimonios superiores a 100 millones de pesos, mientras que para los contribuyentes que superen los 300 millones de pesos la tasa pasará a ser de 1,75 por ciento.
El proyecto contempla adicionalmente que los inmuebles destinados a casa-habitación no tributarán Bienes Personales cuando su valencia determinado resulte igual o inferior a 30 millones de pesos, monograma que en la hogaño es de 18 millones de pesos.
Aunque el oficialismo perdió seis lugares tras la renovación parlamentaria instrumentada el 10 de diciembre pasado, cuando pasó de contar con un total de 41 senadores propios a 35, en almohadilla a los resultados de las elecciones de medio término realizadas el 14 de noviembre, aún se mantiene como primera minoría.
Sin embargo,, no tiene quórum propio, por lo que necesita obligatoriamente negociar con la {oposición} o obtener el apoyo de dos senadores aliados, entre los que se encuentran Magdalena Solari Quintana, del Frente Renovador de la Concordia; y Alberto Weretilneck, de Juntos Somos Río Negro.
Con esos dos legisladores, y si todos los integrantes de la bancada que encabezan el formoseño José Mayans y la mendocina Anabel Fernández Sagasti viajan a Buenos Aires, el Frente de Todos tendrá los 37 votos necesarios para el quórum y la mayoría necesaria para aprobar la iniciativa.
De otro lado,, Juntos por el Cambio logró incorporar a 33 senadores al interbloque, a los que se suma la peronista riojana María Clara del Valle Vega, habitual aliada del interbloque que hoy preside el mendocino Alfredo Cornejo.
No obstante, con la renuncia del bonaerense. Esteban Bullrich, oficializada durante la sesión del 9 de diciembre, la {oposición} buscará que jure este miércoles el primer suplente de la lista, que compartía con la coetáneo senadora Gladys González. Se manejo de José María Torello, exjefe de asesores durante la presidencia de Mauricio Macri y coetáneo manager del PRO.
Fuera de los dos grandes conglomerados políticos queda la cordobesa Alejandra Vigo, de origina peronista y que avala políticamente a su marido, el representante Juan Schiaretti.