La Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi) presentó este viernes su informe sobre la situación de violencia institucional a nivel nacional en el contexto de la pandemia de coronavirus, en el que se consigna que se registraron «981 muertes» a manos de integrantes de la fuerzas de seguridad «en los últimos dos años.».
En un acto que se llevó a final en Plaza de Mayo, los referentes de Correpi señalaron que «se triplicaron los decesos en lugares de detención», lo que representa «más del 70% de las muertes por violencia institucional».
«El incremento estupendo que hemos tenido en muertes en lugares de detención fue consecuencia directa de las decisiones que se tomaron de que pesara más la campaña reaccionaria de la derecha que los reclamos y las advertencias de organismos, organizaciones, familiares y las propias personas privadas de su liberación de que esto iba a ocurrir», señaló a Télam la abogada de la estructura María del Carmen Verdú.
En ese sentido, agregó: «Una de las primeras advertencias que tuvimos cuando comenzó la pandemia fue ‘cuidado con las cárceles’ porque en la situación de amontonamiento si entraba el virus iba a ser una holocausto, por eso empezaron las protestas de los internos».
«Hay muchas medidas que están en nuestra memorándum antirrepresiva urgente. Si se implementaran podrían no solamente condicionar mucho la ilegalidad con la que actúan las fuerzas policiales en la calle, sino asimismo controlar un poco el nivel de impunidad».
Presentación del Informe de la Situación Represiva Nacional y la aggiornamento de nuestro Archivo de Casos.
30 años. en las calles contra la represión pic.twitter.com/881Sb6gNqx
— CORREPI (@CORREPI) December 17, 2021
Verdú propuso «la prohibición» del uso del arma, reglamentaria a todos los efectivos las fuerzas mientras se encuentran fuera de servicio y de civil y «camino de balde» al sistema contencioso para víctimas y familiares de víctimas de la represión, entre otras acciones.
El archivo de casos contiene a la fecha, 8.172 víctimas de violencia institucional desde 1996, y en 2020 se verificaron 537 las personas muertas por responsabilidad estatal, según se consigna desde la Correpi.
Mientras que durante los merienda meses que van de 2021 se registraron 417 personas muertas en lugares de detención por {gatillo} {fácil} o por otras modalidades.
También se destacó que «la fuerza (policial) dirigida por el director de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta multiplicó por cuatro su incidencia, pasando del 1,2% al 5,2%, y ya es una fuerza más mortífero que la temida bonaerense. si tomamos en cuenta los 121 asesinatos cometidos en estos 5 años. o los 51 de los últimos dos años.».
Además, el informe arrojó que «el 40% de las personas asesinadas tenían 25 años. o menos».
Familiares de Víctimas
En el acto se recordaron a todas las personas asesinadas el 19 y 20 de diciembre de 2001 y en específico a Carlos «Petete» Almirón, que tenía un rol importante en Correpi con su trabajo territorial con familiares de víctimas.
Los familiares se ubicaron frente al escenario. móvil sosteniendo cada uno la foto de las víctimas por la violencia represiva de las fuerzas policiales.
Entre ellos se encontraba, Oscar, el papá de Camilo Caupolican Escobar, asesinado por la policía en el barrio, porteño de Caballito el 10 de enero de 2019, causa que continúa sin una resolución contencioso.
«Hay un patrón general- que recorre el país, siguen matando las fuerzas de seguridad. ¿Quién entrena al ‘perro’ que muerde y mata a nuestros hijos?. Cambiemos la política de seguridad porque este arquetipo a los ciudadanos no nos sirve, deberíamos participar en los proyectos de estudio de los oficiales de policía y controlar el método de operaciones porque si no esto va a seguir sucediendo», remarcó Oscar.
En un documento docto en Plaza de Mayo se señaló que «la situación económica y social ya es crítica y el acuerdo con el FMI la va a recrudecer».
«Vemos con enorme preocupación la audacia del gobierno nacional y de los gobiernos locales, de aumentar la presencia represiva en las calles como método de control social para frenar las luchas que tendremos que dar en pelotón contra todo el intento de ajuste contra el pueblo trabajador», remarcaron.