El abogado del policía acusado de asesinar de un disparo en el pecho al adolescente Luciano Olivera el pasado viernes en la {localidad} de Miramar aseguró que al efectivo “se le escapó el tiro” y que en ningún momento “le apuntó” con su arma, reglamentaria a la víctima.
Lautaro Reúsa, abogado defensor de Maximiliano González (25), el policía bonaerense detenido acusado de matar de un disparo a Olivera (16), dijo que su cliente le refirió que “nunca le apuntó con su arma” al adolescente.
“Él (por González) refiere en todo momento que nunca apuntó con su arma; sí que la llevaba montada, pero que no apuntó hacia el cuerpo de Luciano”, indicó.
El ilustrado dijo al canal Todo Noticias que recién el sábado pudo ponerse en contacto con su defendido y que aún no declaró porque hay pruebas y nociones que no fueron por el momento incluidos en la causa que lleva delante la fiscal Ana Caro, titular de la Unidad Funcional de Instrucción descentralizada de Miramar.
“Hasta el momento están las primeras diligencias realizadas por la Policía Federal (PFA), que eran las pruebas testimoniales. Faltaban la planimetría del lugar y el informe preliminar de autopsia, elementos que consideramos importantes”, aseguró.
Si acertadamente el mensaje definitivo de la autopsia, aún no fue realizado, la fiscal aseguró que Luciano sufrió una «muerte, inmediata» a causa de «shock hipovolémico», adecuado al disparo recibido.
A partir de la información transmitida por la médica de la Asesoría Pericial que llevó delante el estudio forense, Caro precisó que «hay un orificio de entrada en el radio del corazón» y que «específicamente la bala le perforó el corazón y el pulmón derecho en la parte inferior«.
«También le causó una daño hepática que es la que produce la muerte, de forma instantánea, y posteriormente sale el disparo a la consideración de la espalda«, señaló la fiscal.
En la autopsia, intervino por otra parte un perito de parte aportado por la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), institución que se puso en contacto con la familia, de la víctima y se presentó como particular dañado, tras lo cual realizó «presentaciones delante la fiscalía, la Auditoría General de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense y delante la Procuración General», según informó.
Disparó con el arma, reglamentaria
El asesinato de Olivera fue cometido la amanecida del viernes final, cuando un patrullero con cuatro efectivos a lado quiso identificar presuntamente al adolescente que se trasladaba a lado de una moto Yamaha YBR 125 roja.
En circunstancias que aún son materia de investigación, efectivos que iban en otro móvil se cruzaron en su camino en la avenida 9, entre las calles 32 y 34, y luego de descender de esa mecanismo, González le efectuó un disparo con su arma, reglamentaria.
“Entendemos que Luciano siempre estuvo en la moto y avanza hacia el móvil policial. De las testimoniales no surge un forcejeo, sí que unos efectivos manifiestan que se le escapó el tiro”, aseguró Reúsa, y agregó que “dos efectivos tienen heridas en una pierna, uno de ellos es González, que corresponderían con un golpe con la moto”.
Por final, el abogado recordó que su defendido “se encontraba en otro móvil” que asistió al llamado de otra mecanismo policial.
González está imputado por el delito de «homicidio agravado por el uso de arma, de fuego y la condición de policía», que prevé una pena de prisión perpetua.
Por su parte, la fiscal aguarda las pericias a la vaina servida del proyectil, que fue hallada en el lugar,, mientras que el plomo que perforó la remera, el buzo, la campera que la víctima llevaba puestos, y que atravesó su cuerpo, no pudo ser localizado durante los rastrillajes llevados a final tras el hecho.
Por otra parte, el Ministerio de Seguridad bonaerense dispuso que fuera removido el comisario Edgardo Vulcano, quien había sido designado en la regencia de General Alvarado en marzo de 2021.
