Darío Barassi decidió contar una historia realmente muy fuerte que involucra a su padre y dejó a todos sin palabras ni capacidad de reacción.
El conductor de «100 Argentinos Dicen» habló del fallecimiento de su progenitor y la excusa que usó para no rendir un examen de abogado. Darío Barassi fue muy directo al respecto.
«Hay que matar {gente}. Tenía un final de Derecho Penal. Mi papá ya estaba recontra muerto, y le dije: ‘Mire, doctor, murió mi viejo. Yo no llego a rendir. Me tengo que ir a San Juan urgente’», remarcó Darío Barassi.
El animador confesó: «Y él me decía: ‘No, Darío, rendilo, rendilo por teléfono. Yo te llamo y te hago unas preguntas’. ‘Bueno, bueno. Si estoy entero lo hago’. Me saqué un 8 por teléfono».
Días antes, Darío contó otra sucedido sobre lo que ocurrió tras la muerte, de su padre: «Lo que yo hice sufrir a los novios de mi vieja posteriormente de que murió mi papá. Hay uno, el primero, que con mis hermanos, digo la marca, con un cuchillo Tramontina, fuimos y le pinchamos las gomas del utilitario cuando la caldo a agenciárselas».
Y agregó: «¿Ya lo conté que mandé a apretarlo? ¡Y sí! Le pagamos a uno y lo hicimos, pero fue porque se estaba mandando equivocaciones él. ¡Con mi vieja no! Abro convocatoria nacional, en búsqueda de un nuevo padre para mí. Está diosa la vieja. ¿Me gusta mi mamá? ¡Tengo que retornar a terapia urgente, chicos!».
La emoción de Darío Barassi por el fin de una etapa de su hija
Darío Barassi habló de Emilia, de 2 años., fruto de su matrimonio, con la comediante Luli Gómez Centurión: «Hoy término su salita de 2. Bailó. Saltó. Se rió. Cantó. Nos dio besos y abrazos. Lloró. Gritó y corrió. Verla ahí, autónoma y con amigos me hace pensar en lo orgulloso que estoy de ella».
El conductor confesó: «La Pipi crece. Firme, con personalidad y alegría. Mi espumajo se cae a mares. Enana, le dije al oreja volviendo, te amo y te admiro. Ella me dio un beso con espumajo y me dijo: ‘Para que te dure’. Nada más que afirmar».
La semana pasada el conductor había escrito: «Se levanta y quiere su universo, se baña y quiere su universo, se duerme y quiere su universo, mi universo es ella».
A principios de noviembre Barassi viajó a Nueva York durante una semana y además habló de su hija: «Me pidió el mico, la contribución, el monstruo marino, me hizo cosquillas, tortas y carreras.Hoy me volvió el alma al cuerpo. Enana mía, no aguantaba un segundo más sin verte».