República Checa, uno de los países más afectados por la coetáneo ola de coronavirus que recorre Europa, informó este miércoles un nuevo récord de 25.864 casos en las últimas 24 horas, mientras el Gobierno evalúa hacer obligatoria la vacuna para algunas personas.
Se manejo de la primera vez que el país de la Unión Europea (UE) supera los 25.000 casos en un día, con 3.000 más que el inicial récord para una {jornada}, que había sido anunciado el viernes pasado.
El Ministerio de Salud dijo adicionalmente que la tasa de infección trepó a 1.061 por cada 100.000 habitantes en los últimos siete días, casi el doble que en la semana previa, informó la agencia de noticiero DPA.
República Checa es uno de los únicos cuatro países del mundo con una incidencia longevo a 1.000 casos por cada 100.000 habitantes, {junto} a Austria, Eslovaquia y Eslovenia, todos miembros de la UE.
El número de hospitalizados en la República Checa ascendía este miércoles a 5.652, con 799 de ellos en estado circunspecto, y, del total, el 79% son mayores de 65 años. sin inocular, según el Instituto de Información Sanitaria y Estadística (Uzis).
Con el aumento de los contagios, el Gobierno evalúa decretar la trabajo de la inoculación contra el coronavirus para algunas personas, como los adultos mayores y el personal médico, marcial y policial.
Solo el 58% de la población habilitada se encuentra vacunado con el esquema completo.
También está bajo consideración del Gobierno una propuesta de especialistas de acortar de seis a cinco meses el tiempo entre la segunda dosis y la de refuerzo.
El Gobierno tiene previsto anunciar sus planes pronto, probablemente la semana próxima.
El Gobierno rechazó esta semana decretar un confinamiento para frenar la expansión del virus, restringiendo los contactos y el movimiento de la población, dejando la iniciativa a las autoridades regionales.
La región de Zlin, en el este del país y una de las zonas más afectadas, con una incidencia de 1.329 casos por 100.000 habitantes, prohibió durante dos semanas eventos de más de cien personas tanto en espacios interiores como al flato independiente.
El pasado lunes entró en vigor en todo el país la trabajo de presentar un certificado de inmunización (inoculación o curación) para entrar a lugares de ocio como bares, restaurantes, eventos culturales y deportivos.
Por lo tanto, ya no se acepta, como antes,, un test placa de Covid-19 en el país de 10 millones de habitantes.
Los eventos están limitados a 1.000 personas, aparte los culturales y deportivos, donde sigue siendo posible llenar, el capacidad al 100% de la capacidad, siempre que el público, tenga un certificado de inoculación o de haberse curado en los últimos 180 días.
Además, las empresas están obligadas a hacer al menos un test semanal a sus empleados y a los autónomos no vacunados, medida impuesta todavía en los colegios.
Tras estabilizarse en mayo la monograma de muertes por coronavirus, que en total suman hasta ahora 32.408, la mortalidad ha vuelto a ascender desde finales de octubre, con 1.689 fallecimientos desde el 25 de octubre hasta este martes.