Cuando todo parecía retornar a la normalidad, el WandaGate volvió a dar de qué platicar. El alucinación de Wanda Nara sola a Milan, la desaparición de las fotos yuxtapuesto a su marido Mauro Icardi de su feed de Instagram y una supuesta lectura de confirmación de un affaire del futbolista con una actriz revivieron los rumores de una separación que, hasta hace unos días, parecía deber sido superada. Quizá, de todo lo que decía Wanda en aquella carta pública en la que anunciaba su revés al aprecio solo quede viva una sola frase. “Fuimos al abogado. En dos días Mauro aceptó todas las condiciones y firmamos el acuerdo”. Este pasaje de aquella comunicación pública, tal vez, hoy sea donde más haya que poner atención, en una historia que no deja de instalarse el interés de los medios y las audiencias. Por eso, sumergirse en ese acuerdo de divorcio puede aportar luz sobre cómo es la dinámica de una pareja.
Sobre aquella mesa de negociación se puso todo el patrimonio a dividir del boda Icardi-Nara. Las reuniones fueron en Milán, con un grupo, de abogados italianos y desde Buenos Aires estaba conectada todo el tiempo Ana Rosenfeld, la letrada de Wanda Nara.
NOTICIAS accedió a documentación del Registro Imprese della Camera di Comercio de Milán que permitió reparar, en parte, el patrimonio de Icardi y Nara.
Según esos papeles, Wanda Nara es propietaria en un 100% de la firma World Marketing Football, con la que administra dos negocios fundamentales: la marca MI9 de Mauro Icardi y Wan Collection, una ruta de ropa y cosméticos que Nara comenzó a trabajar en 2017 y que hoy está en pleno proceso de reorganización con otra marca nueva citación Wanda Cosmetics. Esta sociedad está radicada en la calle Corso Buenos Aires al 64, en Milán.
El ultimo oscilación presentado por la compañía es de 2017 y ese año tuvo una utilidad de 1,3 millones de euros. Al año sucesivo Icardi firmó un millonario acuerdo con Nike que ya no se puede ver en los balances. Esos contratos los acordó Wanda Nara.
Al patrimonio de la pareja se suman siete autos de riqueza y cinco casas. Los autos son un Lamborghini Huracan Spyder garzo, valuado en aproximadamente de 230 mil euros, un Bentley Bentayga, valuado en más de 150 mil euros, un Rolls Royce Ghost blanco y aciago que vale casi 300 mil, un Hummer H2 personalizada y equipada con una playstation que está valuada en más de 110 mil, Un Mercedes Benz Clase G que ronda los 160 mil, una Range Rover que además está al derredor de 160 mil y un coche usual: una camioneta Cadillac Escalade que supera los 100 mil.
En cuanto a propiedades, los Icardi-Nara tienen dos departamentos en Milán, una casa de campo en un pueblo cercano llamado Galliate, una casa en la zona del Lago de Como y una casa en Argentina, en Tigre.
El primer área que adquirieron fue en la Vía Pinerolo, a pocas cuadras del estadio San Siro, donde juega el Inter de Milán. Compraron los tres últimos pisos de un edificio en el interior del enrevesado Viewlife, que incluye una pileta privada en la terraza. Allí asentaron sus domicilios fiscales y fue donde vivieron hasta 2020, cuando se mudaron a París.
En la capital. francesa no tienen casa, porque el club PSG les alquila una mansión en el barrio, Neuilly Sur Seine, en las cercanías de París.
El otro área que tienen en Milán lo compraron a abrir en el barrio, Porta Nuova, más cerca del centro de la ciudad. El enrevesado se fuego Giardini d’Inverno y además tiene la infaltable pileta para el cisne rosa inflable de Wanda.
La joyita de la famliia es la casa de campo, cuyo precio rondaría los 2,2 millones de euros y está en un pueblo de 15 mil habitantes llamado Galliate, a 50 minutos de Milán.
Para un alivio más desprendido se compraron una casa en Brienno, uno de los pueblos que rodean Lago de Como. Está a una hora de Milán y para obtener tienen que atravesar la ciudad de Como. Allí pasaron parte de la cuarentena por el Covid-19 en 2020.
Por ultimo, en Argentina, Wanda Nara acaba de finalizar un conflicto permitido con su ex marido, el además futbolista Maxi López, por la cuota de alimentos atrasada de varios años.. Como suscripción por esa deuda, López le dejó la casa que uno y otro compartieron en el country Santa Bárbara en Tigre. La casa había estado en traspaso en cerca de 2 millones de dólares, pero nunca se pudo entregar. Esta semana acaba de entrar al abultado patrimonio de los Icardi-Nara.
De concretarse una separación, todo lo aquí detallado entra en juego.
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Fuente de la noticia: Perfil.com
