Deportes

Cavallo y la era de la deconstrucción del fútbol

Alguien tenía que dar el paso delante. Y el que lo dio fue el australiano Joshua Cavallo, volante del Adelaide United de la Primera División de Australia, ahora internacionalmente reconocido por ser el primer futbolista profesional en actividad que se declara invertido.

Soy futbolista y soy gay. Todo lo que quiero hacer es jugar al fútbol y ser tratado de la misma manera”, afirmó Cavallo en un video publicado en sus redes sociales esta semana.

Varios clubes y futbolistas de todo el mundo salieron a agradecerle por esa exposición de principios: “¡Gracias, @JoshuaCavallo por dar un paso adelante! Tu valentía contribuye a normalizar la diversidad en el mundo del deporte”, tuiteó el FC Barcelona.

Cavallo, de 21 años. y quien jugó para el Sub-20 de su país, explicó que no deseaba seguir manteniendo en secreto su sexualidad. “Intentar exhibir de la mejor manera las capacidades propias y vivir esta doble vida es extenuante, es algo que no quiero que nadie experimente”, agregó.

Hace dos años., Antoine Griezmann, figura de la Francia campeona del mundo en Rusia 2018, pidió dejar de desmentir la homosexualidad en un círculo en el que, como en todo círculo, existe. “Si un compañero lo contara, me sentiría orgulloso”, dijo. Olivier Giroud, su compañero en la selección campeona del mundo, reconocía una dificultad que Cavallo acaba de relativizar: “Es imposible declararse homosexual en el fútbol”. Ahora Griezmann tributó a Cavallo con un posteo en sus redes sociales: se sintió orgulloso. 

En el final tiempo hubo un movimiento subterráneo, surgido de los propios futbolistas, para deconstruir un deporte cimentado sobre la saco de una masculinidad hegemónica, durante décadas alimentada culturalmente a través de rituales, chistes, idiosincrasias, medios de comunicación y publicidades, y que en Argentina está sintetizada en algunos cantitos de tribuna.

“Recuerdo haber leído sobre Justin Fashanu, quien se convirtió en el primer futbolista profesional masculino en revelar que es gay, y ocho años después se quitó la vida. Esto me preocupaba”, reconoció el mediocampista australiano.

Sobre Fashanu, Netflix hizo un necesario documental. Nueve años. antaño de su revelación, Nottingham Forest había pagado un millón de libras para llevarlo a su equipo. Cuando el monitor Brian Clough se enteró de la orientación sexual de la hado contratada, no lo perdonó. Fashanu, “negro y maricón”, finalmente lo blanqueó en una entrevista a The Sun, que lo llevó a su portada con trivio catástrofe: “Estrella futbolística de 1 millón de libras: soy gay”. Fashanu se suicidó en 1998, luego de que un pollo lo acusara de atropello sexual. Más tarde se comprobó que la denuncia era falsa.

Fuente de la noticia: Perfil.com

Comentarios de Facebook

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba