San Rafael, una ciudad de ciclistas que extiende esta actividad a los turistas

La complejidad de opciones permite disfrutar de estos recorridos a ciclistas.
El cicloturismo es una de las propuestas fuertes San Rafael para la temporada veraniego, tanto en sus paisajes naturales de cerros, embalses o el Cañón del Atuel, como en bodegas y el ámbito urbano, donde la velocípedo es el transporte preferido de los vecinos, con ciclovías, circuitos, guías especializados y un promedio de tres bicis por vivienda,
La geodesía de este sección del sur de Mendoza se adapta a las micción de cualquier cicloturista, con circuitos para todos los niveles todavía en Valle Grande, Las Tinajas, 25 de Mayo y los cañones del Atuel y del Diamante, según datos de la Dirección de Turismo restringido.
Muchos de estos recorridos fueron marcados por numerosas competencias en modo duatlón, triatlón y pentatlón, que siempre incluyen ciclismo, en la preparado mountain bike.
La complejidad de opciones permite disfrutar de estos recorridos a ciclistas que gustan de grandes desafíos deportivos, donde prevalece el esfuerzo físico, y todavía los que utilizan la velocípedo para desplazarse por su ocupación de residencia y quienes buscan nuevas experiencias de aventura.

La velocípedo es el transporte preferido de los vecinos en San Rafael.
El entorno sanrafaelino dota a cada salida de una escenografía singular, entre las que destaca el Cañón del Atuel, donde el circuito por camino de ripio es el mismo que utilizan los vehículos a motor, con bajadas en irresoluto muy exigentes.
El entorno presenta descensos en caracol, paredones de cientos de metros que bordean el cañón, coloridas geoformas que surgen en el reconvención, el río Atuel que desaparece entubado y aparece en cada usina hasta formar el imponente albufera de Valle Grande, para continuar como un curso de rápidos, ideal para el rafting.
En Villa Las Tinajas, los senderos de montaña se caracterizan por la presencia de grandes rocas, la Sierra Pintada y el parque arqueológico, en tanto los sectores productivos olivícolas, viñedos y bodegas todavía cuentan con circuitos y mapas para recorrerlos, a solas o con la ayuda de algún práctico especializado.
Uno de estos prestadores es Emanuel Ponce, quien comentó a Télam que San Rafael «está culturalmente adaptada a la bici, porque históricamente y hasta la hogaño se ha manejado en bici» y destacó que existe un promedio de «tres bicicletas por casa o comunidad».

San Rafael, una ciudad de ciclistas que extiende esta actividad a los turistas.
«Nuestras calles son suficiente anchas y el tránsito está adaptado a la bici, con muy depreciación accidentología, y tenemos una escuelita de mountain bike en el parque Hipólito Yrigoyen, con muchedumbre capacitada que prepara a los chicos para paseos por la montaña o para las carreras», agregó.
Como la mayoría de sus colegas, Ponce ofrece tanto arriendo de bicicletas como guiadas con sus rodados o con los del turista, que según la distancia y las condiciones físicas se pueden combinar con trayectos en camioneta, como en el Cañónd el Atuel, que es uno de los desafíos preferidos de los visitantes.
En este caso, comentó que «se puede hacer por distintos caminos, como ser por la ruta 173 en un reconvención netamente de montaña, entre Valle Grande y El Nihuil», en una extensión de unos 50 kilómetros.

El cicloturismo es ideal para quienes buscan nuevas experiencias de aventura.
«Se puede ir en camioneta hasta El Nihuil, descender hasta la central 3 y ahí subir nuevamente las bicis al carrito para no hacer esa subida intensa de 13 kilómetros, y los llevamos hasta el mirador del Submarino, y ahí volvemos desmontar la bicis hasta el valle, donde podemos combinar con rafting», explicó.
Ponce aclaró que «si alguno quiere hacer esa subida, puede hacerlo, pero este software es de 35 kilómetros en ocaso, aprovechando todas las pendientes».
También está la opción de hacerlo «por la ruta 143, en la Cuesta de Los Terneros, y en ese caso hacemos un circuito que nos lleva a El Nihuil y de ahí bajamos por la 173 hasta Valle Grande y la ciudad , lo que suma un circuito de 180 kilómetros».
Hay muchedumbre que recorre esa distancia en dos o más días, con pernoctación en carpa en la montaña o en El Nihuil, donde hay infraestructura hotelera, de cabañas y camping, para quienes todavía se alquilan alforjas y parrillas para tolerar carpa y equipo para acampar.

San Rafael, una ciudad de ciclistas que extiende esta actividad a los turistas.
Por otra parte, señaló que «para los que les gusta la adrenalina y el mountain bike, tenemos muchos circutios en las zonas de Los Reyunos, Las Tinajas, Valle Grande y 25 de Mayo, que tienen muchísimos senderos y circuitos que nos conectan con lugares muy hermosos, como pozos de agua y una geodesía increíble»
«En la zona de Las Tinajas -siguió- están los parques de Aventura y La Paloma, está todo conectado por el circuito de La Ollita, con muchos senderos que presentan alternativas como bajadas desafiantes».
Para los que sólo quieren recorrer la ciudad o hacer enoturismo, dijo que hay «ciclovías que llevan a las zonas de las bodegas para recorrer establecimientos, como las bodegas Riviere, La Abeja, Bianchi, Jean Rivier, Murville, o la taller de grasa de oliva Yancanelo, que conforman un corredor productivo».
San Rafael cuenta con circuitos mapeados que pueden consultarse por internet o bajarlos mediante aplicaciones, pero todavía se puede simplemente preguntar a los vecinos, ya que hay un conocimiento común en la ciudad sobre las opciones que la región ofrece para los amantes de las bicicletas.
Fuente de la noticia: Agencia Telam